ERC se hunde al perder dos de sus cuatro concejales

Batacazo, debacle, gran derrota... Los adjetivos se quedan cortos para expresar los pésimos resultados que Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) obtuvo ayer. Los republicanos perdieron la mitad de los concejales en el Ayuntamiento de Barcelona -pasaron de cuatro a dos- y 20.000 votos. Son los peores resultados de ERC en Barcelona desde 1995.

El sonado fracaso se repitió en las capitales de provincia catalanas. ERC desapareció de un plumazo de los Ayuntamientos de Girona -donde tenía cuatro concejales-, Tarragona y Lleida -dos regidores en cada una-. También en ciudades de la segunda corona de Barcelona, como Sabadell y Terrassa. En toda Cataluña, ERC perdió más de 80.000 votos y más de 200 concejales. El auge de la Candidatura d'Unitat Popular (CUP) fue clave en el pésimo resultado de ERC.

El candidato de la coalición Unió per Barcelona (UpB), Jordi Portabella, se mostró compungido y abatido por unos resultados que no esperaban, según reconoció. Pero Portabella no hizo autocrítica y achacó el batacazo a que la campaña "se planteó de un primer momento de forma bipartidista". De hecho, el candidato de UpB hizo una lectura más bien positiva, pensando más en el futuro congreso nacional del partido. "Hemos sido capaces de parar el golpe y de mantener la presencia independentista", afirmó.

Portabella quiso también defender el buen entendimiento que ha habido entre las tres formaciones de la coalición -ERC, Reagrupament y Democràcia Catalana- y aseguró que el futuro pasa por "sumar". El candidato de UpB felicitó a Xavier Trias por su victoria e instó a "respetar los resultados".

Más humilde y crítico se mostró el presidente de ERC, Joan Puigcercós, quien reconoció que no fue "una noche feliz". El líder republicano asumió: " nos dio un correctivo hace cuatro años, que a lo mejor no supimos entender a tiempo".

Los republicanos lograron su máximo histórico en 2003, pero entonces iniciaron una caída libre que en las últimas autonómicas les costó perder la mitad de votos. La caída de los republicanos en el abismo les llevará a plantearse una profunda reflexión con vistas al congreso nacional de octubre. El presidente de ERC se mostró seguro de "cerrar el declive electoral" y poner punto final a una etapa negra para la formación. Puigcercós confirmó que reunirá hoy a la ejecutiva del partido para convocar el congreso nacional con el objetivo de renovar la formación y decidir "qué personas darán un paso adelante y quiénes deberán ponerse a un lado".