Azkoitia ofrece cursos para fomentar la integración de los inmigrantes

El Ayuntamiento de Azkoitia pondrá en marcha en mayo unos cursos para "promover la integración" de la comunidad paquistaní y la magrebí en el municipio, según explicó ayer a EL PAÍS, el alcalde, Asier Arambarri. Los cursos, mensuales, de 10 horas de duración, versarán sobre derechos humanos, en especial atención a la condición de la mujer, y sobre cultura vasca y euskera.

La iniciativa nació, según el edil, tras detectar "una llegada importante de inmigrantes" a la localidad procedentes de Pakistán y Marruecos. Azkoitia, con una población de 11.351 habitantes, tiene un 7% de extranjeros no comunitarios frente al 6,6% de inmigrantes totales del País Vasco. "No se trata de aprobar o suspender a nadie", subrayó el alcalde, aunque señaló que la asistencia a los cursos incidirá para obtener el informe de arraigo social por parte del Ayuntamiento. Imprescindible a su vez para aquellos que deciden acogerse al reagrupamiento familiar.

Arambarri subrayó que "la convivencia siempre ha sido buena, pero entendemos que hay que ir más allá, no se puede fundamentar en la no relación entre las dos comunidades". "Queremos una convivencia pacífica pero partiendo de la relación entre todos", aclaró.

Además, recordó que la iniciativa se comenzó a perfilar el año pasado a través de tres encuentros que mantuvo el Ayuntamiento con otros tantos colectivos. El primero de ellos con asociaciones de inmigrantes, el segundo con población autóctona de Azkoitia y el tercero formado por personas procedentes de los dos grupos anteriores.

Derechos y deberes

El alcalde también es consciente de la polémica que han levantado otros programas similares en Francia y Cataluña y aclaró que "hay que ser conscientes que todo aquel que abandona su país es por necesidad". "Aquí sólo se ofrece la posibilidad de acceder a un curso, nadie le va a poner nota a nadie", incidió de nuevo el edil. "Que todos nos sintamos azkoitiarras, con nuestros derechos y obligaciones", apuntó.

Azkoitia se enfrenta al reto "al igual que Europa" de integrar comunidades como la musulmana y la occidental, añadió el edil, que reconoció que los cursos se enfocan principalmente a los inmigrantes procedentes de Pakistán y Marruecos, y no a otros presentes en el municipio como los latinoamericanos.