Absuelto el socialista Luna en el primer juicio que se celebra de Gürtel

El paradójico caso de Ángel Luna, portavoz parlamentario socialista valenciano, principal denunciador de las estrechas relaciones del Gobierno de Francisco Camps con la trama Gürtel, juzgado por supuesto encubrimiento a instancias del PP, se resolvió ayer con la absolución del diputado. Su versión de los hechos sobre el destino de un informe policial de la red corrupta, estimó el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) valenciano, fue tan razonable como la ofrecida por la acusación. Y ante la falta de pruebas, concluyó, resultaba obligado absolverle.

El caso se inició el 24 de marzo de 2010. Aquella mañana, en un debate parlamentario con Camps, el diputado mostró un informe policial que detallaba el modo en que la red se embolsó tres millones de euros con la visita del Papa a Valencia, en 2006, a través de un contrato de Canal 9. La televisión autonómica la dirigía entonces Pedro García, muy amigo del cabecilla de Gürtel, Álvaro Pérez, El Bigotes; y fiel colaborador del presidente Francisco Camps. El informe, que había sido publicado por EL PAÍS cinco meses antes, estaba bajo secreto de sumario.

El PP denunció a Luna por revelación de secretos. La acusación resultó inviable porque el portavoz socialista no era abogado, fiscal, juez ni parte en el caso Gürtel cuando esgrimió en público el informe. Con aquella denuncia se inició, sin embargo, un "tortuoso camino" procesal, en palabras de Gonzalo López Ebri, teniente fiscal del TSJ, que pedía la absolución de Luna.

El portavoz socialista afirmó que el informe le llegó de forma anónima y que desconocía dónde estaba porque tras personarse en la causa, el 7 de mayo de 2010, tuvo acceso a todo el sumario por vía informática y se despreocupó de él, mientras que la justicia no se lo reclamó hasta el 20 de diciembre. El juez del TSJ Juan Montero consideró su explicación lo bastante sospechosa como para abrirle juicio por encubrimiento: ocultar el informe pese a sus requerimientos para proteger al supuesto autor de la revelación de secretos.

Ambas versiones tienen sentido, dice la sentencia. Pero "no se han acreditado en la prueba practicada más allá de toda duda razonable y en términos bastantes para quebrar la presunción de inocencia, por lo que el tribunal, ante esas dos hipótesis posibles, no puede optar por la más desfavorable, sino en todo caso por la que resulte más acorde con el principio pro reo [a favor del acusado]".

Luna se mostró satisfecho y lamentó que el PP haya pretendido convertir este procedimiento en "ejemplarizante". Jorge Alarte, líder de los socialistas valencianos, afirmó que la absolución "evidencia que no hay que tener miedo a Camps; que el Estado de derecho y la verdad acaban imponiéndose". El PP consideró que la sentencia probaba que Luna "mintió al decir que no sabía que el documento era secreto".