Innovación sin autocomplacencia

Las comparaciones, si no se realizan entre semejantes, carecen de sentido y solo pueden conducir a la autocomplacencia. Esa es una de las principales conclusiones de Indicadores de innovación y benchmarking. Reflexión y propuesta para el País Vasco, un libro elaborado por Innobasque y el instituto de competitividad Orkestra, presentado ayer en el Colegio de Ingenieros de Vizcaya, con la presencia de los directores de ambas entidades, Guillermo Ulacia y José Luis Curbelo, respectivamente.

Los indicadores para medir la innovación deben ser diferentes en cada región sostiene el estudio. Así, no se puede situar en la misma balanza a Suecia y España. "Debemos cambiar los indicadores de medir la innovación", aseguró Curbelo.

Un estudio propone nuevos indicadores para medir la innovación

"Hay que compararse con comparables", apuntó el investigador de Orkestra y director del estudio, Mikel Navarro, quien consideró que Euskadi se sitúa por sus características en el mismo apartado que los länder de Sajonia y Baden-Wurtemberg, el Piamonte italiano o la Alta Austria. Si no se obra de esta manera, la comparación no es precisa y normalmente siempre se toma como referencia regiones con menor desarrollo.

El texto plantea nuevos indicadores que se deben tener en cuenta para medir la innovación, como las estadísticas de las estrategias laborales, la cualificación laboral o la productividad, entre muchos otros. Estos medidores permitirían realizar una radiografía más concreta de la innovación en Euskadi.

Pese a superar la media española y la europea en esta materia, al medirse con regiones semejantes, los datos de Euskadi resultan algo inferiores. "En contra de lo que se pensaba, se desvanece la idea de que en innovación estamos mejor", sostuvo Navarro. Por ejemplo, las regiones alemanas, austriacas e italianas analizadas suman más publicaciones científicas y más patentes.

Pese a que las ineficiencias de la estructura de innovación vasca se han ido corrigiendo, en las zonas de referencia este cambio ha sido más elevado. Finalmente, el modelo vasco de conectividad, "dada la endogamia de su sistema", presenta retrasos con sus semejantes.