La piqueta asalta la fábrica de Mahou
En la fábrica de Mahou se desarrollan desde finales de diciembre los trabajos de demolición. La cervecera ha decidido pagar entre tres y cuatro millones de euros de su bolsillo ya que FCC no está dispuesta a adelantar nada. Como mucho, la constructora planea a corto plazo poner una caseta en el estadio de San Blas e iniciar los estudios de topografía. Al retrasarse la duración de las obras también se pospondría la demolición del Calderón, por lo que, según los cálculos del club, la mudanza no se realizaría hasta la temporada 2014-15. Desde el Consistorio aseguran que una vez aprobadas las licencias pertinentes ya no tienen nada que ver.
Mientras las partes implicadas se ponen de acuerdo la incertidumbre dentro del Atlético se dispara todavía más con precedentes como el del Nuevo Mestalla, el futuro hogar del Valencia. FCC, también responsable de las obras, las paralizó por la falta de liquidez del equipo, que no podía hacer frente a sus deudas. Según Gil Marín y Cerezo eso no pasará con La Peineta, ya que todo el dinero obtenido por la venta del Calderón, unos 200 millones de euros, irá directamente al coste de la construcción del nuevo recinto. Fernando García Abásolo, el tercer accionista del Atlético (5% de las acciones) por detrás de Gil Marín y Cerezo (aproximadamente el 72% y 19%, respectivamente) y crítico con la gestión del club, cree que el traslado a La Peineta -el nuevo estadio no mantendría el nombre, ya que el club pretende explotarlo comercialmente- no se producirá "antes de la temporada 2015-16, y eso dándose muy bien". Entretanto, la vegetación se extiende por La Peineta.
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