Rubalcaba: "Se ha detenido al comando más importante"

Para el vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, no cabe duda de que ETA está más cerca del final que nunca tras la desarticulación, el martes, del que considera el comando más importante que le quedaba a la banda. Rubalcaba resaltó, también, que, tras las declaraciones de los miembros del comando ante la policía, han quedado esclarecidos todos los asesinatos cometidos por ETA desde que rompió la tregua en junio de 2007, excepto el de los dos guardias civiles asesinados en Palma de Mallorca en julio de 2009, el último perpetrado por la banda. El número de asesinatos cometidos en ese periodo, la última ofensiva de la banda terrorista, fue de 11.

El fiscal del Estado dice que tiene un plan B para contrarrestar a Sortu

El vicepresidente primero aprovechó la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros para valorar que el comando detenido era "muy peligroso" por la mezcla de experiencia de sus componentes y por ser desconocidos por la policía.

A este comando le atribuye la policía todas las acciones de ETA no esclarecidas en la etapa posterior a la ruptura de la tregua de 2007, hasta 14 atentados, como el cometido contra el cuartel de la Guardia Civil de Burgos, de julio de 2009, que casi lo destruyó y dejó 66 heridos; y dos asesinatos, el del brigada del Ejército Luis Conde, en septiembre de 2008 en Santoña, y el del inspector de policía Eduardo Puelles, en junio de 2009, en Arrigorriaga (Vizcaya).

Anteriormente fueron detenidos, entre 2008 y 2010, los autores del atentado de la T-4 de Barajas, que costó la vida a dos ecuatorianos -Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate-; del de Cap Breton, en el que murieron dos guardias civiles; el del edil socialista de Mondragón Isaías Carrasco; el del empresario Ignacio Uría y el del guardia civil Juan Manuel Piñuel en Legutiano (Álava). Solo quedan por detener, del último periodo terrorista de ETA (2007-2009), los autores del asesinato de los dos guardias civiles en Palma de Mallorca, en julio de 2009, que Rubalcaba vaticinó ayer que terminarían por serlo.

A partir de ahí, Rubalcaba valoró que se había desarticulado lo "más importante" de todo lo que quedaba de la banda, con lo que "estamos más cerca del final de ETA, con toda seguridad". El vicepresidente no quiso pronunciarse sobre si este comando se preparaba para actuar ante una hipotética ruptura de la tregua de ETA declarada en septiembre y revalidada el 10 de enero. "Si estaban haciendo algo en este momento o no, lo ignoro. Habrá que remitirse a las declaraciones que hagan en lo que queda de detención o a las que hagan ante el juez", dijo.

A su vez, el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, aseguró ayer en Sevilla que si la izquierda abertzale tiene un plan B para presentarse en las elecciones municipales, la fiscalía y la policía también lo tienen para contrarrestarlo. El fiscal manifestó que Sortu "no es un partido sino el mero intento de aparentar formalmente el cumplimiento de la ley para mantener a la desesperada la presencia de ETA en un horizonte político al que ya sabe que no va a llegar de ninguna manera".