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El fondo para empresas en crisis

El PSOE apuntala a Viera ante las peticiones de dimisión de la oposición

Griñán "no ve motivos" para la salida del exconsejero de Empleo - El grupo socialista veta de nuevo una comisión de investigación sobre los ERE

Lourdes Lucio

La entrevista publicada ayer por EL PAÍS con el exdirector general de Empleo, Javier Guerrero, causó conmoción en los tres partidos representados en el Parlamento andaluz. La radiografía que hace Guerrero de la ausencia de control de los fondos públicos -"no podíamos estar al pairo de los caprichos del interventor"; "el control de las ayudas a posteriori lo hacíamos por contacto telefónico"; "nadie puso pegas a los intrusos de los ERE que estaban desempleados"- fue utilizada por los bancos de la oposición para cargar con extrema dureza contra el Gobierno socialista y pedir la dimisión de los responsables políticos que durante nueve años mantuvieron a Guerrero al frente de un departamento en el que se concedieron 647 millones de euros para pagar expedientes de regulación de empleo y ayudas a empresas en crisis. No obstante, la frase que más reprodujeron los diputados fue la de que "los intrusos no son intrusos, sino criaturas que están desempleadas".

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El único exconsejero en activo es José Antonio Viera, secretario general del todopoderoso PSOE de Sevilla, diputado autonómico y senador por la comunidad. Los otros dos -Guillermo Gutiérrez y Antonio Fernández- no están aforados ni ocupan despachos de la Administración. Viera escuchó desde su escaño las peticiones para que dimitiera del presidente del PP, Javier Arenas; del coordinador de IU, Diego Valderas, y de todos los diputados populares que intervinieron en el pleno de ayer durante el debate de hasta 11 iniciativas.

El líder de los socialistas sevillanos aguantó con entereza el tirón desde su pupitre. Ha repetido a todo el que le ha preguntado que tiene la conciencia tranquila y que no va a dimitir al frente del PSOE de Sevilla. Su "contrato", como él dice, como secretario general no acaba hasta 2012. Viera tiene el respaldo de su ejecutiva provincial, de la inmensa mayoría de los alcaldes de la provincia e incluso del ahora desarticulado grupo crítico que le disputó la secretaría general en el pasado congreso. También tiene el sostén del secretario general del PSOE y presidente de la Junta, José Antonio Griñán, quien ayer comentó a un grupo de periodistas que "no ve motivo" alguno para que Viera dimita. Caso contrario, dijo, es el del exdelegado provincial de Empleo de Sevilla, Antonio Rivas, que ha dimitido como responsable de la agrupación de Camas al figurar dos concuñados suyos como intrusos en los ERE, además de tres militantes de esa organización. Fuentes de la ejecutiva regional aseguran que "no van a permitir" que Viera se vaya y ven tras la estrategia de la oposición un intento de provocar un enorme agujero en el PSOE de Sevilla.

Esta agrupación es la que mejores resultados electorales obtiene -cinco escaños de diferencia respecto al PP en el Parlamento- y es el corazón y el pulmón del PSOE de Andalucía. Además, Griñán debe fundamentalmente al PSOE de Sevilla su ascenso a la secretaría general.

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El dirigente sevillano, que ha convocado hoy a la ejecutiva provincial, tiene también el apoyo de la dirección federal del PSOE, según aseguran varias fuentes. En el pasado comité director, el vicesecretario general, José Blanco, le preguntó: "¿Estás fuerte?". "Sí -le respondió Viera-, te puedes ir tranquilo".

¿Hay voces en el PSOE que creen que Viera debe asumir su responsabilidad? También las hay, pero, por el momento, son muy minoritarias.

El PP convirtió el pleno de ayer en un auténtico bombardeo contra el Gobierno. El argumento común fue que los ERE, de los que se han beneficiado 25.000 personas, han ido a parar a los "amiguetes" del PSOE, cuando, por ahora, hay ocho militantes socialistas. La mayoría socialista volvió a vetar una comisión de investigación con la excusa de que el consejero de Empleo dará todas las explicaciones en una comparecencia ordinaria.

En el choque que cada 15 días mantienen José Antonio Griñán y Javier Arenas, el popular exigió al socialista que consintiera una comisión de investigación o presentase su renuncia como presidente. "Estamos ante una trama, lo dice una persona que ha tenido la confianza del PSOE durante muchos años", señaló Arenas, informa Isabel Pedrote.

Griñán contraatacó: "Si tuviéramos que dar más credibilidad a un imputado [Guerrero no lo está] que a una persona honorable, tendríamos que convenir que el señor Correa [en prisión por el caso Gürtel] entró en el PP de su mano. Pero usted lo negó y yo le creí a usted, porque creo más en su palabra que en la de un imputado, y usted debería hacer lo mismo".

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