Hereu exige apoyo a Montilla y el PSC para ganar Barcelona

Doce horas después de salir victorioso de las primarias de los socialistas de Barcelona, Jordi Hereu acude a un acto por la reurbanización de la carretera de Sants en su encuentro con la Rambla de Brasil. Los vecinos le paran para felicitarle y los saludos se repiten a través del cristal de una cafetería cuando le reconocen mientras concede una entrevista a EL PAÍS. Dice que está contento pero, sobre todo, pensando en el trabajo que hay que hacer en los tres meses que quedan hasta el 22-M.

"Ahora viene el momento de la verdad. Las primarias han servido para movilizar. Se ha vivido de una forma muy positiva y marca el camino para fortalecer al PSC", reflexiona. Hereu parece haber pasado página a la falta de confianza de la cúpula de su partido en él, algo que acabó desencadenando el proceso de primarias. "José Montilla y el partido expresaron su punto de vista. Yo mantuve el mío, me la jugué y he ganado con el apoyo de la gente. Pero ahora debe ser todo el PSC. Se lo he pedido a Montilla y también a José Luis Rodríguez Zapatero el apoyo del PSOE. Y he de decir que lo tengo plenamente. Iremos a todas".

Hereu: "Hemos de abrirnos a personas y sectores que pueden aportar mucho"

Iceta: "Con Hereu debemos ir todos juntos a ganar las municipales"

Está convencido de que tras las primarias contará con el apoyo del 100% de los socialistas y no del 60% que fue el porcentaje que logró en las elecciones porque el resto se lo llevó su oponente, Montserrat Tura. "Tenemos que sumar, primero. Y, luego, abrirnos a mucha gente. Yo no sé si Montserrat Tura se incorporará pero lo que ella ha expresado y simboliza sí hay que incorporarlo. Nos equivocaríamos si no lo hiciéramos. Necesito sus puntos de vista, sus ideas".

El aparato del partido analizará hoy los resultados de las primarias, pero el viceprimer secretario, Miquel Iceta adelantó ayer que, descartada Tura, ahora toca cerrar filas con Hereu. "Con Jordi Hereu, todos juntos a ganar las municipales", titulaba ayer Iceta el análisis semanal que publica en su bloc y en el que reiteraba que ahora el PSC está en mejores condiciones para hacer un buen papel que "hace dos meses".

El gobierno que encabeza Hereu y cuyo mandato expira en tres meses tiene un perfil gestor. La carga política se concentra en contados ediles. Si fuera una paleta de colores, el predominante sería el gris. Hereu entiende que el resultado de las primarias obliga a muchos cambios: "Yo defiendo lo que hemos hecho pero creo que la candidatura deberá tener un marcado perfil político. Nos tenemos que abrir más porque hay personas y sectores muy interesados por Barcelona, que no son socialistas, que pueden aportar mucho". Es decir, que la presencia de independientes en su lista será algo más que testimonial. Fuentes de la ejecutiva nacional del partido apoyan esta idea. "Hereu tiene ahora las manos más libres para hacer la lista que quiera. Quizás para hacer la lista que Tura habría querido, con más independientes que nunca para dar un mensaje renovador", apuntan.

Hereu está convencido de que el proceso ha sido un revulsivo dentro del PSC. "La izquierda debe empezar a despertar, sobre todo porque ya estamos empezando a notar los efectos de un gobierno de Convergència i Unió (CiU). No solo se nota en los recortes sino en la ideología que hay detrás y que ataca las políticas progresistas. Hay un centro izquierda que estaba un poco dormido y que tiene que espabilar".

Hereu cree que un gobierno liderado por Xavier Trias sería débil: "solo sería un títere de Artur Mas. Ya lo hemos visto en dos meses. No ha dicho nada cuando se han anunciado los recortes en la dotación de los mossos, ni en los ajustes en cultura o educación. Es la estricta subordinación a un gobierno liberal y conservador". Con tono de enfado pone ejemplos, como la congelación que se quiere imponer al Museo Nacional de Ciencias Naturales o el Centro de Arte del Canódromo de Meridiana: "Ponemos los edificios, las colecciones. Qué más quieren? Yo no le reiré las gracias a Ferran [en referencia a Mascarell, consejero de Cultura de CiU y antiguo compañero de partido y gobierno municipal].

Aunque la confianza de la cúpula del partido en la victoria de Hereu es más bien escasa, la dirección sí reconoce una cosa: "Los recortes de Mas pueden desinflar el efecto Trias: a ver cómo justifica el candidato de CiU los tijeretazos sociales que anuncia día sí día también el Gobierno catalán. El candidato insiste en que el PSC puede y debe ser el que tenga más apoyos. "Solo si somos el partido más votado podremos abrir el baile, si no lo abrirá Trias".