Detenidos 13 miembros del entorno de ETA una semana después de la tregua

Una semana después del último comunicado de la banda terrorista ETA declarando el alto el fuego "permanente y general" susceptible de ser "verificado por la comunidad internacional", la Guardia Civil y la Policía Nacional siguen luchando contra la actividad de la banda y sus organizaciones y detuvieron ayer en Navarra y Álava a 10 jóvenes a los que vinculan con el entorno terrorista, coordinados por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska. Uno de ellos era el hijo del portavoz de la izquierda abertzale, Txelui Moreno, que asistió visiblemente airado al arresto. "Esta es la respuesta a la tregua. ¡Esta es!", dijo Moreno mientras observaba cómo se llevaban esposado a su hijo Iker, de 24 años, relacionado con la organización Ekin. La Ertzaintza arrestó en Andoain (Guipúzcoa) a otra persona por kale borroka y dos más fueron detenidos en Francia.

Mientras el Ejecutivo se reafirmaba en su "firmeza y determinación contra ETA", según las palabras utilizadas por el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, Batasuna acusaba al Gobierno de "entorpecer la nueva era política que se abre en Euskal Herria". Tasio Erkicia y Miren Legorburu leyeron un comunicado en el que se preguntaban el "por qué y para qué" de la última redada, "cuando una de las partes está dando numerosos pasos, está actuando con valentía hacia la apertura de un proceso democrático".

Rubalcaba fue tajante en su valoración de las detenciones, y ni siquiera se detuvo en un comunicado calificado como claramente insuficiente tanto por el Gobierno como por la mayoría de las fuerzas políticas. "Definitivamente no ha sido la mejor noche para el entorno de ETA", celebró. "Las fuerzas de seguridad no están dispuestas a que las organizaciones ilegales resurjan. Ekin es una organización de ETA que trata de imponer las tesis de la banda al conjunto de la izquierda abertzale, y Askatasuna trata de presionar al Estado en relación a la política penitenciaria". Sobre el momento elegido para llevar a cabo las detenciones, aseguró que se trata de decisiones judiciales, no gubernamentales.

El vicepresidente primero se refirió al hecho de que uno de los detenidos fuera hijo del portavoz de la izquierda abertzale, para asegurar que era una mera coincidencia. "La Guardia Civil trata a todo el mundo por igual, cualquiera que sea su apellido o sus relaciones personales". El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, opinó que se trata de un "hecho simbólico" que pone de relieve las discrepancias dentro de Batasuna y ETA ya que mientras el padre se pronuncia sobre el fin de la violencia, el hijo formaría parte, según señaló Jáuregui en una entrevista a la cadena SER, del que "probablemente" sea el sector más favorable a la lucha armada.

Los 11 detenidos en la madrugada del martes en España (Álava y Navarra) formaban parte, presuntamente, de las organizaciones Ekin y Askatasuna -seis y cuatro arrestados, respectivamente-. En Bayona (Francia) fueron detenidos Igor Uriarte y Aiala Zaldibar, huidos en septiembre y octubre tras dos operaciones contra Ekin y Segi, aunque el tribunal de apelación de Pau los puso en libertad. El 25 de enero se pronunciará sobre la aplicación de una euroorden de la Justicia española contra ellos. La Ertzaintza imputó al detenido en Andoain la autoría de dos ataques de kale borroka perpetrados en esta localidad en abril de 2002 contra la vivienda de un ertzaina y contra el vehículo de un familiar de un concejal del PSE.

La operación de la Guardia Civil en Navarra fue la continuación de la desarrollada en septiembre contra Ekin. Se practicaron 13 registros en domicilios y locales. La Policía Nacional llevó a cabo el operativo contra Askatasuna, iniciado en 2008 tras la denuncia por amenazas vertidas en una página web presentada por un periodista.