"Afganistán jamás será un refugio para terroristas"

Barack Obama hizo ayer una rápida visita sorpresa -tres horas en vez de las seis previstas- a Afganistán para informar a las tropas de que se está haciendo un progreso importante en la guerra. "Cada uno de vosotros es un héroe", comunicó el presidente de Estados Unidos a sus hombres y mujeres de uniforme. "Con vuestro esfuerzo, ganaremos esta guerra", añadió sobre un conflicto que se inició hace nueve años. El presidente norteamericano prometió que Afganistán jamás volverá a ser "un refugio para los terroristas" que quieren atacar suelo estadounidense.

Ante más de 3.500 soldados reunidos en un inmenso hangar en la base militar de Bagram (a las afueras de Kabul), el presidente fue presentado por un festivo y distendido general David Petraeus, jefe del mando central conjunto de EE UU y máximo jefe de las tropas de la OTAN en Afganistán. Petraeus regaló a Obama una camiseta de la 100ª División Aerotransportada. "Si lleva esto, presidente, nadie se meterá con usted", le dijo.

El presidente solo hizo una llamada de cortesía a Karzai durante su estancia

El viaje de Obama a Afganistán es el segundo como comandante en jefe de las tropas de EE UU. El primero fue en marzo de este año. En 2009, el presidente realizó un viaje de similares características -sorpresivo y con la máxima seguridad- a Irak.

El momento en el que ha viajado Obama no podía ser más significativo: a poco más de una semana de recibir un informe que plasmará lo sucedido en Afganistán en casi una década y cómo está funcionando la estrategia que se comenzó a aplicar el año pasado, que conllevó un aumento de las tropas de 30.000 efectivos. En la actualidad, 150.000 hombres de las fuerzas de la coalición están destinadas en Afganistán; cerca de 100.000 son estadounidenses.

Washington ha declarado que para mediados de 2011 debe comenzar la retirada de las tropas estadounidenses, mientras que la OTAN ha dicho que pretende ceder el control de la seguridad a las fuerzas afganas en 2014. El anuncio de la fecha de julio 2011 ha sido criticado por la oposición republicana, que considera que es una forma de dar alas a los talibanes.

Obama no se trasladó desde la base a la Embajada de EE UU en Kabul para reunirse con el presidente Hamid Karzai, según la Casa Blanca por motivos de seguridad. Según el Gobierno afgano, por las difíciles condiciones meteorológicas -viento y tormentas de arena-, que hacían muy peligroso trasladar al mandatario estadounidense en helicóptero. Obama realizó una simple llamada de teléfono a Karzai, expuesto al escrutinio público tras la filtración de los cables del Departamento de Estado que dan cuenta de la enorme corrupción en el seno de su Ejecutivo.