La bajada de impuestos a la vivienda recorta 4,6 millones

La segunda rebaja de impuestos a la compra de vivienda que plantea el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo, a punto de iniciar el trámite parlamentario, tendrá un impacto negativo sobre las cuentas autonómicas de 4,6 millones de euros. Esta caída en la recaudación se dejará sentir en el presupuesto de 2011, el más austero y problemático de la historia de la autonomía en Galicia.

La reforma se plantea al mismo tiempo que se anuncia la supresión de servicios como el Noitebús, que cuesta seis millones de euros, o los recortes a los comedores escolares. El propio Consello Económico y Social lo criticó duramente en su dictamen advirtiendo de que el proyecto de ley no presenta alternativas al recorte de los ingresos.

No es su única crítica. El CES añade que, en todo caso, "la rebaja fiscal es relativamente escasa si la consideramos individualmente". Precisamente por ello, el Consello no cree realmente vaya a estimular la compra de pisos: "Lo más probable, a la luz de la experiencia, es que la rebaja se traslade a los vendedores de inmuebles mediante un incremento de los precios".

El proyecto de ley se debatió ayer en la comisión parlamentaria de Facenda, donde el PP rectificó y aceptó que los beneficios no se apliquen en la compra de la segunda vivienda, lo que inicialmente duplicaba el coste de la medida.

Recortes mínimos

La reforma plantea la rebaja del 0,25% del impuesto de Actos Xurídicos Documentados en la adquisición de primera vivienda y la constitución de hipotecas. Se complementa con la reducción del 1% del impuesto de Transmisiones Patrimoniales Onerosas para compra de vivienda usada que vaya a ser rehabilitada.

En la comisión de ayer, la diputada socialista María José Caride se lamentó de que el Gobierno del PP estuviese dispuesto a "asumir una rebaja de impuestos de más de cuatro millones para quien ya tiene una vivienda", y recriminó a la Consellería de Facenda que no hiciese caso al informe del Consello Económico y Social (CES). De lo contrario, dijo, "muchos de los puntos que se enmiendan estarían ya corregidos".

El ponente de los populares, Alberto Sueiro, defendió las bondades de la medida para "reactivar el mercado inmobiliario", y asumió que se trata de un texto "mejorable".