Compartir coche para llegar a Barcelona

En Girona se vivieron momentos de tensión a primera hora de la mañana en los andenes de la estación de autobuses, cuando los piquetes impidieron la salida hacia Barcelona de los vehículos que la empresa Barna Bus había dispuesto, a las 7.00 y a las 8.45 horas, para cumplir los servicios mínimos. El autobús era la alternativa escogida por decenas de viajeros que a diario van a trabajar a la capital en tren y que ayer se quedaron sin su transporte habitual: no se habían previsto servicios mínimos en el tramo Portbou-Girona-Barcelona, por el que transitan a diario por 12.000 personas.

Los piquetes también paralizaron un vehículo de Barna Bus hacia el aeropuerto de Girona-Costa Brava, lo que provocó la indignación de numerosos turistas extranjeros que confiaban en poder regresar ayer en avión a sus países y que no pudieron hacerlo.

En la estación se citaron vecinos de Girona que comparten el viaje en tren para ir al trabajo a Barcelona o Figueres y que ayer se organizaron en grupos para realizar el trayecto en coches particulares. Entre ellos, Maria Carme y Lluís. "Hoy vamos a contribuir a contaminar el medio ambiente", decían. "Es indignante que en todo el día no circule ni un tren en este tramo".

Al grito de "¡retirada de la reforma laboral", 2.000 sindicalistas tomaron la frontera entre Girona y Francia, en El Pertús. Miembros de CC OO, UGT y varios sindicatos franceses cortaron la Nacional II durante dos horas (de las 11.30 a las 13.30) en el paso fronterizo. La protesta conjunta respondió también a la jornada de manifestaciones convocada por la Confederación Europea de Sindicatos en contra de los recortes salariales y sociales. Los Mossos d'Esquadra desviaron los vehículos por la AP-7, por lo que no hubo ningún incidente digno de mención, más allá de la cara de sorpresa de los comerciantes de El Pertús, que mantuvieron abierto sin presión alguna para que cerrasen.