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La oposición denuncia que Gramepark hipoteca Santa Coloma

PP, ICV y CiU critican que se destinen 31 millones a salvar la empresa

Lluís Pellicer

Los partidos de la oposición de Santa Coloma de Gramenet (PP, ICV-EUiA y CiU) ven con preocupación cómo el plan de negocio de la empresa pública Gramepark, la que presuntamente se valió de la trama Pretoria para sus negocios particulares, está siendo una "hipoteca" para la ciudad. Tras examinar los números, los tres grupos están convencidos de que parte de las pérdidas y la deuda que arrastra la sociedad proviene de su mala gestión antes de que intervinieran los administradores judiciales, y lamentan que el coste de salvar la constructora sea a costa de dinero de las arcas municipales, que en tres años habrá engullido 30,9 millones de euros, tal como avanzó ayer EL PAÍS.

"Gramepark nos está saliendo excesivamente caro", aseguró la portavoz del grupo del PP en Santa Coloma, María del Carmen Sáez, que aseguró que si la constructora pública no es viable el gobierno municipal deberá ir pensando en liquidarla. "Los errores del equipo de gobierno y la mala gestión de Gramepark los están pagando los ciudadanos. Este traspaso de dinero está hipotecando su bienestar", agregó.

El pleno del lunes prevé renovar un crédito de tres millones

La oposición recuerda, además, que si Gramepark se tratara de una empresa privada hace tiempo ya habría solicitado el concurso de acreedores. "Ya estaría liquidada", sostuvo el portavoz de CiU Manel Olivés. El concejal nacionalista dudó de que la empresa pública sea viable. "Si acaso, es salvable", matizó. Y lo es, a su juicio, solo gracias a las aportaciones que realiza el Ayuntamiento. "Dentro de 10 años todavía estaremos pagando la deuda que nos está dejando Gramepark", agregó Olivés.

Desde las filas de ICV-EUiA, Francesc Sánchez atribuyó la mitad de las pérdidas de 9,7 millones de euros -el triple que en 2008- a la mala gestión anterior a la llegada de los administradores de la Oficina Antifraude de Cataluña. "Las medidas financieras que se han adoptado van destinadas básicamente a salvar Gramepark y a cumplir compromisos, como la construcción de los pisos que se sortearon en junio", explicó. Según Sánchez, los números reflejan "una realidad demoledora: que la empresa está mal".

Se prevé que el pleno del Ayuntamiento apruebe el lunes las cuentas de Gramepark de 2009 y la renovación de una operación de crédito con Caixa Catalunya a cinco años por tres millones de euros.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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