La vuelta de Carlos Berlanga

Hablar de la movida madrileña es hablar de Carlos Berlanga (Madrid, 1959-2002). Compositor de himnos underground de los 80 interpretados por Alaska, como Bailando, A quién le importa o Ni tú ni nadie, el artista polifacético, tercer hijo del director de cine Luis García Berlanga, dejó decenas de pinturas, ilustraciones, portadas de discos, escritos y documentos gráficos, incluido el famoso cómic que contaba las aventuras de la superficial y encantadora Olga Zana. Ocho años después de su muerte, cuatro discos y una exposición recuperan la memoria del cantante y compositor de Pegamoides y Dinarama.

La muestra Ante la cámara, Carlos Berlanga, puede visitarse hasta finales de octubre en el Centro Olontense de Arte Contemporáneo (Codac), en Gibraleón (Huelva). El moderno espacio expositivo, conocido como "cubo blanco" por el original diseño del arquitecto vasco Eduardo Lázaro, ha recibido más de 2.500 visitas los primeros 10 días desde su inauguración. La muestra ofrece la posibilidad de acercarse a la movida madrileña de la mano de uno de sus promotores, Carlos Berlanga, en una colección escogida con mimo por otro vividor de los 80, el pintor, compositor, diseñador gráfico y comisario de esta exposición Pablo Sycet.

La muestra reúne pinturas, fotografías y las canciones que compuso el artista

En la muestra pueden verse 15 fotografías firmadas por Alberto García-Alix, Pablo Pérez-Mínguez, Jaime Gorospe, Jesús Ugalde, Juan R. Yuste y Álvaro Villarrubia, entre otros, con Berlanga como protagonista; junto a pinturas y documentos de todo tipo (el artista dibujaba en trozos de papel, esquinas de periódicos, al final de sus cartas...) que dan una visión de conjunto de su actividad creadora: letras de canciones, ilustraciones, diseños de discos, obra gráfica y esculturas. Cada objeto mantiene su impronta única, su porción de arte improvisado, genuino. La sala temporal del Codac transporta por unos minutos al visitante a la movida madrileña, reunida en torno al Rockola, encabezada por Alaska, Nacho Canut, McNamara, Pedro Almodóvar y tantos otros. "Carlos brilló en todo lo que hizo: compositor, pintor, cantante, autor de cómics, ilustrador... y por eso es, sin lugar a dudas, el artista más dotado de su generación", calibra Sycet, nacido en Gibraleón e íntimo amigo de Berlanga.

"Tratar con Carlos, con Alaska y con Nacho, y colaborar con ellos, ha sido uno de los grandes privilegios de mi vida", añade. Sobre Berlanga afirma que, "a pesar de que era un tímido enfermizo, su talento brilló con luz propia: era un artista único, un seductor nato, un ser irrepetible".

"Dentro de esa vorágine de personalidades convulsas, Carlos era extremadamente excepcional, con sus trajes y sus corbatitas estrechas, una mezcla de contemporaneidad y anacronismo", apunta la mexicana Olvido Gara (Alaska), quien recuerda aquellos años así: "La ciudad que nos acogía sin preguntar edad, orientación sexual, gentilicio o capacidad económica". Ya Pablo Sycet organizó otra exposición, Viaje alrededor de Carlos Berlanga, que pudo verse en 2009 en Valencia y Madrid, y cruzará el Atlántico en 2011 para presentarse en el Centro Cultural de España en México DF y, posteriormente, itinerar por Miami, Buenos Aires y Guatemala.

Pedro Almodóvar, en el catálogo de esta exposición, explicaba que "como todo gran tímido , era una persona atrevida y original". Tres discos con canciones compuestas por él e interpretadas, entre otros, por Los Planetas o Bebe, saldrán a la luz en los próximos días. Sycet no tiene dudas: "Estamos ante la resurrección de Carlos Berlanga".