La caída de la obra pública de la Xunta es la mayor de España

La Xunta echó el ancla a la obra pública en 2009. Según el informe sobre la construcción en España que acaba de publicar la Asociación de Empresas Constructoras de Ámbito Nacional (Seopan), la Administración autónomica licitó el año pasado 521 millones de euros, un 57% menos que en 2008. La administración gallega redujo su actividad constructora más que cualquier otro Gobierno autónomo.

Quitando Ceuta y Melilla, la segunda administración autonómica que más redujo en 2009 su licitación fue la de Castilla-La Mancha con una caída del 27,8%, casi 30 puntos menos que la de Galicia. La media estatal en este índice registró un descenso del 8,3%, en torno a siete veces menor que el de Galicia, que además es la comunidad en la que la licitación está menos descentralizada. El Estado sigue siendo el principal inversor ya que la suma de las obras contratadas por Xunta y administraciones locales no llega al 50% del total. La media de España ronda el 70% en esta categoría.

El informe detalla también la licitación estatal en la comunidad, de la que fueron responsables en su mayor parte los ministerios de Fomento y Medio Ambiente. Las obras públicas contratadas desde la administración general que se desarrollan en Galicia subieron un 10,5% y superan los 1.500 millones de euros, pese a que en el conjunto del Estado bajaron un 29,4%.

La administración local invirtió en construcción, a su vez, un 30% más que la Xunta el año pasado.Los entes locales destinaron 675 millones de euros a obras en 2009, lo que supuso incremento del 123% respecto a su propio registro del año anterior.

Coincidiendo con la publicación del informe de Seopan, el PSdeG aseguró ayer que las inversión total de la Xunta caerá el año próximo hasta un 40%, según el portavoz parlamentario socialista, Xaquín Fernández Leiceaga. "Según los datos que tenemos sobre la elaboración del presupuesto para 2011, los fondos propios de la Xunta van a caer un 50%", señaló. Este "ajuste brutal" obligará al Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo, dijo, a no poner en marcha ningún proyecto nuevo durante el próximo ejercicio. "En la terminología feijoniana, en el año tres no habrá obras, así que tendremos una legislatura perdida tras los recortes de 2009 y 2010", adujo.

Las obras públicas de la Xunta también se colaron ayer en el debate parlamentario. La Comisión de Economía de la Cámara debatió una propuesta del PSOE para desarrollar los mecanismos de control de las contrataciones públicas, al hilo de los sobrecostes millonarios en la autovía de la Costa do Morte. María José Caride defendió una moción, a la que se sumó el BNG a través de Henrique Viéitez, que fue rechazada por la mayoría del PP. La propuesta planteaba aumentar el peso de la oferta económica en la concesión de obras públicas, que ahora no puede superar el 40% del total de la puntuación. Pedro Puy justificó el rechazo de los populares en que una propuesta similar se encuentra ya en la Ley de Economía Sostenible, de aplicación obligatoria en toda España. "Hay otros parámetros que se deben tener en cuenta, como la seguridad vial", añadió, en relación a las infraestructuras de transporte.

Puy contestó más tarde a Leiceaga, informa Europa Press. "Los problemas financieros de la Xunta derivan de un sistema de financiación que defendió el PSOE y de la obligación de devolver al Estado un dinero [2.600 millones] que ellos introdujeron en los presupuestos en base a cálculos completamente irreales de la evolución de la economía española", alegó.