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Entrevista:CARLOS VELLO | Presidente del Centro de Buenos Aires

"Espero terminar con el déficit al final de mi mandato"

Al nuevo presidente del Centro Gallego de Buenos Aires, Carlos Vello, le espera una ardua tarea. La difícil situación económica que vive el hospital de la institución, a la que se suma la crisis económica en Galicia, dibujan un panorama nada alentador, pero aunque la deuda del hospital (gestionado por la Fundación Galicia Saúde) asciende a una cantidad situada entre los 15 y los 18 millones de euros, Vello se muestra optimista cara al futuro y cree que al concluir su mandato dentro de cuatro años podrá dejar el hospital saneado económicamente. Pese a que en las recientes elecciones aparecía como el candidato más alejado de las preferencias de la Xunta, el nuevo presidente insiste en que la institución no debe estar politizada y asegura que mantiene buenas relaciones con el Gobierno gallego. Incluso señala que Alberto Núñez Feijóo le pidió disculpas por una foto en la que el presidente de la Xunta aparecía junto al otro candidato a presidir la institución y que fue utilizada durante la campaña electoral. Tras su triunfo electoral del pasado domingo, la nueva directiva del Centro Gallego tomará posesión el próximo miércoles y comenzará a trabajar en una de las etapas más difíciles de una institución centenaria que presta servicios sanitarios a miles de gallegos que residen en Buenos Aires.

"Hubo una gestión no muy buena; esperamos que no fuese de mala fe"

Pregunta. La Xunta le ha felicitado y dice que fue neutral en la elección, pero el PSOE asegura que su triunfo es un revés para Feijóo. ¿Quién de los dos tiene razón?

Respuesta. El Centro Gallego es una institución apolítica aunque las agrupaciones que lo forman tengan un determinado color. Históricamente siempre hemos tratado de evitar las confrontaciones políticas dentro del centro. Yo no gestioné el apoyo por parte de ninguno de los dos principales partidos de Galicia. Sobre el tema de la foto del otro candidato con Feijóo, en su día ya dije que me parecía una utilización desleal por parte de Seoane pero recibí las disculpas por teléfono del presidente de la Xunta y las acepté. El PSOE me mostró su apoyo durante las elecciones, pero fue por su propia decisión. Nadie se comunicó conmigo en este sentido.

P. Parece que usted será el encargado de dirigir el hospital del Centro Gallego en los próximos años tras haberse esfumado el proyecto del grupo privado 3A Recoletas. ¿Ha hablado de esto con la Xunta? ¿Cuál es el déficit real del hospital?

R. He conversado con el secretario general de Emigración de la Xunta, Santiago Camba, sobre este asunto y me comenta que el tema de 3A Recoletas está definitivamente archivado y la Xunta quiere delegar la responsabilidad en el patronato de Buenos Aires. Ahora se abre un proceso para ver como queda la representación de la Xunta y del Centro Gallego en la Fundación Galicia Salud que es la que dirige el hospital actualmente. Lo que le pedí a Camba es que las aportaciones de fondos de la Xunta se pongan al día, dada la difícil situación económica que vive el hospital. Él se comprometió a que antes de fin de año se harían efectivas las partidas pendientes para 2010. Por lo que nos han dicho estos últimos días el déficit del hospital se sitúa en unos 75 millones de pesos (15 millones de euros) aunque las cuentas del ejercicio que se cerró el 30 de abril de este año aún no son definitivas.

P. ¿Por qué se ha llegado a la situación actual en el hospital del Centro Gallego? ¿Se debe sólo a una mala gestión o hay otras razones?

R. No sería justo que yo señale ahora culpables. Lo que está claro es que ha habido una gestión no muy buena y esperemos que no haya habido mala fe, tal vez lo sucedido se deba a que no existen controles estrictos sobre la gestión. Tenemos que mejorar la situación económica del hospital para que el déficit no nos ahogue y se puedan equilibrar ingresos y gastos.

P. ¿Qué medidas urgentes hay que tomar para salir de esta situación?

R. Una de las primeras cuestiones es ver qué servicios está vendiendo el hospital a las obras sociales, porque tengo mis dudas sobre la rentabilidad de estas operaciones. También, como ya dije, hay que regularizar las aportaciones de la Xunta para evitar que tengamos que afrontar elevados costes financieros para realizar los pagos y, por otra parte, reimplantar algunos servicios que se suprimieron y realizar algunas mejoras en el edificio que no se han acometido pese a estar previstas.

P. Usted dijo durante la campaña que en algún momento el hospital tendría que autofinanciarse y dejar de depender de la Xunta. ¿Se fija un plazo para conseguirlo?

R. Espero que al final de mi gestión, dentro de cuatro años, se haya podido terminar con el pasivo y que el hospital se encuentre en situación de tranquilidad económica. El secretario general de Emigración se ha comprometido a que la Xunta mantendrá su aportación en los próximos años [3,1 millones de euros anuales] aunque entendemos y nos preocupa la difícil situación económica que vive Galicia actualmente. Esperamos que no les pase allá lo que nos sucedió a nosotros acá hace algunos años.

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