La Xunta admite que las llamas penetraron "solo unos metros" desde Portugal

El Parque Natural do Xurés ardió esta semana por dos frentes distintos, ambos en el término municipal de Lobios. De una parte, las llamas que durante días abrasaron el Parque Nacional de Peneda-Gerês llegaron el miércoles de la semana pasada a Galicia como mantuvieron el alcalde, José Lamela, y otros testigos. Tras negarlo durante días, la Consellería de Medio Rural reconoció ayer que el incendio se adentró en el Xurés, aunque matizando que "solo unos metros". Lo dio por apagado en la mañana de ayer.

El otro frente, generado en este caso dentro del territorio ourensano, se originó hacia las diez de la noche del martes y en apenas ocho horas arrasó 164 hectáreas, fundamentalmente de monte raso, según las primeras estimaciones de Medio Rural. En esta ocasión, el fuego, tras rodear la carretera, se acercó a las viviendas de uno de los dos poblados incluidos en el parque natural, Santa María de Cela. La Xunta lo dio por extinguido poco antes del mediodía.

Pero la provincia de Ourense continuaba ayer ardiendo en distintos puntos. Manzaneda volvió a ser pasto de las llamas después de que el sábado dos incendios calcinaran casi 100 hectáreas. El último fuego, del que la Xunta no tenía ayer estimación de superficie afectada, se inició cerca de las once de la noche del martes en la parroquia de Santa María de Cernado y Medio Rural lo dio por controlado a mediodía.

Los servicios de extinción trabajaron además en otro fuego en Vide (Baños de Molgas), en donde ardió una pequeña superficie, y en Cualedro, en donde las llamas arrasaron 46 hectáreas, de las que seis eran de arbolado. Este fuego comenzó a las 20.45 horas del martes y la Xunta lo dio por extinguido a las 3.45 de la madrugada del miércoles.