El presidente de Vital se estrena abogando por la fusión vasca

En sus primeras palabras como nuevo presidente de Caja Vital, Carlos Zapatero lanzó ayer al aire un llamamiento a seguir adelante con el proyecto de fusión de las cajas vascas. Nada más ser elegido por el consejo de administración como máximo dirigente, el ex viceconsejero de Trabajo apeló a BBK y Kutxa, "cajas hermanas", para "desde el respeto y la colaboración" dibujar "un futuro en el que se vislumbre un potente sector financiero vasco".

"Caja Vital tiene que estar en esa construcción, en ese futuro", recalcó Zapatero en su estreno, asumiendo el reto de presidir la entidad alavesa "en un momento delicado por la situación general de la economía". También aludió a la necesidad de crecer en tamaño "desde el sostenimiento y fortalecimiento de nuestra identidad alavesa". "Necesitamos crecer, ser más fuertes, y esto se consigue con más clientes, captados desde nuestra propia estructura, o con acuerdos de colaboración con otras entidades", subrayó.

La candidatura que apoya el PP ve nula de pleno derecho la asamblea de ayer

Lanzó un mensaje de continuidad al equipo de profesionales de la caja, "que mucho tiene que ver con los excelentes resultados obtenidos en estos días", aludiendo a las pruebas de resistencia que confirman a Vital como quinta caja en solvencia y ratifican que no precisará de ningún tipo de apoyo externo de darse el peor escenario posible en la economía. Incluso se acordó de su predecesor en el cargo, Gregorio Rojo, que tuvo que dimitir después de que la justicia, a instancias del PP, anulara su nombramiento. Zapatero destacó la "magnifica labor" al frente de la caja del ahora presidente de la Cámara de Comercio alavesa. Y anunció, conservando su mano izquierda de político, su voluntad de reunirse con trabajadores, directivos de la entidad, Gobierno vasco y entidades fundadoras -Diputación de Álava y Ayuntamiento de Vitoria-. También tendió la mano para celebrar un encuentro con sus homólogos en las cajas vizcaína y guipuzcoana, Mario Fernández y Xabier Iturbe, respectivamente.

Zapatero no quiso entrar en la polémica abierta después de que el PP reabriera el frente judicial al solicitar que se anule su nombramiento y el de otros dos vocales del consejo. Los populares entienden que la sentencia abre la puerta a la entrada en su lugar de tres de sus miembros, Juan Antonio Zárate, Javier Maroto y Ainhoa Domaica -no habría problemas, según afirman fuentes populares, con la nueva Ley de Cajas que impide a los cargos electos estar en los órganos directores, puesto que solicitarían que su entrada se realizara ajustándose a la normativa vigente cuando Rojo fue reelegido en marzo de 2008, antes de la reforma legal-.

De los 100 miembros que conforman la asamblea, asistieron 83, de los cuales 44 votaron a favor de la entrada de Zapatero como vocal, 18 en blanco, 1 voto fue nulo y 20 se abstuvieron. El candidato recibió el apoyo de la alianza PSE-PNV, mientras que el PP y Aralar se abstuvieron, y otros representantes, como los de EA, votaron en blanco.

Poco antes, el representante de la plataforma Vital Sí, Miguel Garnica, defendió la postura del PP y mostró su oposición al cónclave al considerarlo "nulo de pleno derecho". El secretario general de Vital, José Ignacio Besga, respondió argumentando que, con la llegada de Zapatero, la caja ha dado pleno cumplimiento a la sentencia puesto que los tres afectados por el fallo de la Audiencia de Álava ya no están en los órganos de gobierno: Gregorio Rojo dejó la presidencia, el ex diputado foral Alfredo de Miguel -ayer, presente- dimitió tras su imputación por participar en una supuesta trama corrupta que salpica al PNV alavés; y Adolfo Bruno Otxoa abandonó su puesto tras cumplir los 70 años. De Miguel fue reemplazado por el ex consejero de Interior, Javier Balza, y Otxoa fue relevado por Fernando Velasco (EA). La entidad financiera argumenta también que los relevos se dieron en asambleas en las que los populares presentaron a sus candidatos y no consiguieron la mayoría.

Tras ser nombrado vocal, un fugaz consejo de administración eligió a Zapatero como nuevo máximo dirigente. Ayer dijo que dedicará sus primeros esfuerzos a la gestión financiera, económica y social de la entidad. "Espero lograr ser noticia cuando corresponda por los avances y los logros de la Caja y sólo en esas materias", concluyó en su debut.