Detenidos el amigo fotógrafo y el gestor de Bettencourt

La Brigada Financiera de la policía francesa detuvo ayer para interrogarles, presumiblemente por un delito de fraude fiscal, a dos protagonistas del caso Bettencourt: al fotógrafo François-Marie Banier, al que la millonaria Eliane Bettencourt, de 87 años y propietaria del imperio de cosméticos L'Oréal, ha hecho regalos por más de 1.000 millones de euros, y al gestor de la fortuna personal de la anciana, Patrice de Maistre, uno de los personajes que más aparece en las conversaciones grabadas furtivamente por un mayordomo familiar. En una de estas conversaciones, De Maistre, tras recordar a Bettencourt que tendrá problemas con unas cuentas suizas si no las cambian de emplazamiento, añade: "Me estoy moviendo para enviarlas a otro país, Hong Kong, Singapur o Uruguay". La hija de Bettencourt denunció a Barnier por "abuso de debilidad".

La policía también se interesa por la situación fiscal de la isla de Arros, en las Seychelles, comprada en 1997 por la anciana millonaria. También fueron detenidos el ex abogado especialista en asuntos fiscales de Bettencourt, Fabrice Goguel, y el gerente de la isla, Carlos Vejarano.

Si bien las cuentas suizas son parte evidente de la fortuna de la anciana, no está claro de quién es ahora la isla, que vale alrededor de 500 millones de euros: la policía deberá dilucidar si aún pertenece a la anciana o si esta, al ponerla hace años al nombre de una fundación propiedad del fotógrafo, se la regaló a este, como se insinúa en alguna de las grabaciones.

Mientras, Francia asiste estupefacta al desarrollo, día a día, de este interminable, tentacular e incontrolable episodio de odios familiares, herencias y enjuagues fiscales de la tercera fortuna del país.