Los partidos eluden un recorte drástico de sus subvenciones en vísperas electorales

Mientras el Gobierno aprobaba ayer nuevos recortes, el Parlamento catalán también sacaba las tijeras. Los diputados se bajarán el sueldo el 8% lo que queda de año, porcentaje que en el caso del presidente de la cámara, Ernest Benach, alcanzará el 15%. Sin embargo, el tijeretazo de la mesa del Parlament salva el grueso de las subvenciones que reciben los grupos parlamentarios, que suman más de 17 millones de euros cada año. Los grupos salen airosos de los recortes y solo verán disminuir su subvención el 2%. Además, el recorte sólo será aplicable a partir de junio. Con esta operación todos los partidos consiguen salvar casi íntegramente su subvención en un momento de muchos gastos como es la campaña electoral.

La decisión la tomó ayer la Mesa del Parlament sin que hubiese rifirrafe alguno entre los partidos, según informaron fuentes de la cámara catalana. Las subvenciones que otorga el Parlament a los grupos varían en función del número de votos recibidos en las elecciones autonómicas y los diputados que tienen. La finalidad teórica de estas subvenciones es prestar apoyo técnico a los diputados, ya sea contratando personal de secretaría, de relaciones con la prensa o asesores de los ámbitos que precisen.

Sin embargo, en el Parlament existe el convencimiento de que una parte importante de este dinero se acaba destinando a los gastos generales de los partidos, desde el pago de campañas electorales hasta el mantenimiento de sus respectivas sedes. El actual sistema de subvenciones del Parlament se remonta a 2001, cuando los partidos aceptaron hacer más transparentes sus cuentas a cambio de recibir más dinero, una decisión que fue contestada por el Tribunal de Cuentas.

Más allá de las subvenciones, todos los diputados daban por hecho desde hace días que debían recortarse el sueldo. Y no sólo el salario base, sino también los complementos que reciben por su asistencia a comisiones o el desempeño de labores como la de portavoz. De esta manera, un diputado raso perderá este año 1.747 euros de un sueldo base de 43.697. Los portavoces de los grupos se recortarán el salario el 10%. Eso es dejar de ingresar unos 4.300 euros de los 87.522 que cobran durante el año. Los miembros de la Mesa y el presidente de la cámara aumentan su recorte hasta el 15%. Benach, con un sueldo de 152.954 euros dejará de percibir unos 11.400 euros.