Centro de salud joven: cerrado en 'finde'
La capital se queda sin el único servicio que dispensaba gratis la píldora poscoital
El centro de salud joven del Ayuntamiento de Madrid deja de prestar servicio en fin de semana. El Consistorio ha decidido cerrarlo en sábado y domingo por "falta de demanda", según explicó ayer el gerente de Madrid Salud, José Manuel Torrecilla. Hoy ya no abrirá. Hasta esta semana, un equipo de médico, enfermera y administrativo hacía guardia de diez de la mañana a dos de la tarde para atender a los jóvenes que se acercaban a la calle de Navas de Tolosa (Centro) en busca de consejo sobre métodos anticonceptivos, salud sexual, píldora del día después o para hacerse la prueba rápida del VIH.
Con este cierre, Madrid se queda sin recursos sanitarios específicos para jóvenes abiertos en fin de semana. El otro centro que les atendía, gestionado por la Asociación de Planificación Familiar de Madrid, en la calle de San Vicente Ferrer (Centro), se vio obligado a cerrar los días festivos porque se quedó sin subvenciones públicas. El Consistorio dejó de conceder al Centro Joven de Anticoncepción y Sexualidad los 24.000 euros con los que pagaban parte de los sueldos y de los suministros básicos.
Hasta hace unos meses, muchas jóvenes acudían a estos dos centros en busca de una receta de la píldora poscoital. Pero en octubre del año pasado, el Ministerio de Sanidad decretó la libre dispensación de la pastilla (venta sin receta en las farmacias), con lo que descendió el número de consultas. Eso es lo que, según el Ayuntamiento, ha motivado el cierre de su centro Madrid Salud Joven en sábados y domingos. La Asociación de Planificación Familiar de Madrid está en contra del cierre, porque "deja desatendidos a los jóvenes de la ciudad", explica su presidenta, Alexa Segura. "Es precisamente esos días cuando tienen relaciones sexuales y cuando pueden necesitar consejo médico", añade.
El centro de salud joven municipal era además el único que ofrecía la píldora poscoital de forma gratuita a jóvenes que no podían disponer de los casi 19 euros que cuesta en la farmacia.El cierre del centro Madrid Salud Joven en fin de semana supone que las jóvenes que antes acudían a ver al médico porque habían tenido una relación sexual de riesgo las noches del viernes o del sábado deben ir ahora directamente a una farmacia a comprar la píldora del día después, cuya efectividad disminuye a medida que pasan las horas. El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, criticó al Gobierno cuando autorizó que la píldora se dispensara en las farmacias sin receta.
El alcalde calificó la decisión de "error médico" y "contrasentido" y aseguró que él, en los centros de salud municipales, iba a seguir dispensándola con consejo médico. Sigue siendo así entre semana, pero ya no en sábado y domingo, que son los días en los que más la necesitan los jóvenes, según la experiencia de los profesionales en planificación familiar. Un estudio reciente sobre el uso de la anticoncepción de emergencia en Cataluña demostró que el consumo era más elevado entre las chicas más jóvenes (entre 16 y 19 años) y que ellas recurrían a la píldora principalmente en fin de semana.
El gerente de Madrid Salud, José Manuel Torrecilla, recuerda que cuando abrió el centro había muchos problemas en Madrid para conseguir la píldora poscoital. "Vimos que había mucha demanda en fin de semana, porque nadie la recetaba y había que peregrinar por medio Madrid para conseguirla, así que establecimos equipos de guardia que se cubrían con horas extra", explica. "Con la libre dispensación en farmacias, eso dejó de tener sentido". Según sus datos, en los últimos meses sólo acudían al centro cinco pacientes al día (en fin de semana) para consultar por coitos de riesgo. Un dato que no le cuadra a la Asociación Madrileña de Planificación Familiar, que habla de 30 ó 40 atenciones cada fin de semana.
Además, la asociación recuerda que los usuarios no sólo acudían al centro por la píldora poscoital. También para consultas sobre infecciones de transmisión sexual, test de embarazo, revisiones ginecológicas, información sobre métodos anticonceptivos, VIH, etcétera. También ofrece preservativos gratuitos. "Hay que recordar que los jóvenes están trabajando o en el instituto de lunes a viernes, por lo que el fin de semana era buen momento para consultar sus dudas", insiste Alexa Segura, su presidenta. "La OMS recomienda que este tipo de centros tengan el horario de atención más amplio posible".
Torrecilla reconoce que el centro era útil en fin de semana. "Hacíamos una buena labor sanitaria, porque captábamos a los jóvenes para otras cosas. Como el caso de las chicas que repiten con la píldora del día después. Está claro que lo que necesitan es un método anticonceptivo. Ahora no podemos hacer seguimiento", asegura.
La experiencia de Lara, de 19 años, fue precisamente esa. La segunda vez que se presentó en el centro a pedir la píldora, en el registro constaba la primera. "El ginecólogo me dijo que había pasado suficiente tiempo, pero me avisó de que es una dosis de hormonas muy fuerte. Allí llevan un control y te informan de métodos anticonceptivos", relata. La última vez que fue, hace menos de un mes, era sábado. "La sala estaba llena, de chicas y de chicos", asegura. La atención en el centro es gratuita y confidencial. "Puedes acudir cualquiera de los 365 días del año", decía aún ayer su página web.
Torrecilla insiste en que el cierre no tiene nada que ver con una restricción de presupuesto. Y da un dato: todo el personal de Madrid Salud -organismo autónomo del Ayuntamiento que agrupa todas las actividades municipales de salud pública y drogodependencias y que cuenta, entre otros, con 15 centros de salud propios- le cuesta al Consistorio 60 millones de euros. "Abrir en fin de semana no significa un esfuerzo", asegura. La portavoz de Juventud del grupo socialista, Almudena Fernández, en cambio, sí cree que el ahorro ha tenido algo que ver. "Este año el presupuesto para jóvenes se ha recortado un 12%", afirma.
El gerente apunta que, "si el ministerio diera marcha atrás, que no lo hará, el Ayuntamiento volvería a abrir su centro en sábados y domingos". Sobre el resto de consultas, Torrecilla afirma que ninguna es urgente. La portavoz socialista discrepa: "El centro no sólo se dedica a dar la píldora poscoital. El fin de semana es cuando los jóvenes tienen más tiempo y resulta que no van a poder ser atendidos en toda la ciudad. La OMS recomienda uno de estos centros por cada 100.000 jóvenes, y en Madrid tenemos 700.000".
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