Saident aplica la tecnología RFID para seguir la pista a la ropa en las lavanderías

Durante la Segunda Guerra Mundial, en una época en los que los sistemas de radio y radar aún estaban en la niñez de su desarrollo, los aviones utilizaban un sistema de frecuencias que permitía, a los pilotos, distinguir entre naves amigas y enemigas. Con el correr del tiempo, este sistema de transmisión, abaratado en coste y empequeñecido en tamaño, llegó a oídos de Daniel Rodríguez, un emprendedor con formación en ingenierías electrónica e informática. "Era abril de 2003 y llevaba tiempo con la inquietud de levantar un negocio propio. En cuanto supe de esta tecnología, vi sus inmensas posibilidades empresariales. Cualquier empresa que necesitara identificar, trazabilizar, identificar o inventariar personas, animales o cosas estaría dispuesta a utilizar la aplicación".

Dicho y hecho. Daniel Rodríguez dejó su trabajo y comenzó a viajar, ir a ferias, sondear el mercado de posibles clientes y en mayo 2004 nacía Saident, una empresa especializada en soluciones avanzadas de identificación basadas en radiofrecuencia (RFID).

La tecnología es sencilla. "Es una etiqueta inteligente que almacena la información en un chip, y un lector que permite identificar, a distancia, cualquier producto, lo que facilita un versátil empleo del dispositivo en tareas de logística, gestión de activos, sector sanitario y farmacéutico", explica Rodríguez.

Muy volcada en el campo de I+D, Saident ha desarrollado diversas tecnologías propias a partir del RFID. "Por ejemplo, un sistema para evitar hurtos en las joyerías o un sistema de gestión inteligente de lavanderías. Incluso, hemos instalado, en una tienda de ropa, un aparato que, mientras se prueba una prenda, le dice al cliente si existe en otros colores o en otra tallas y su composición textil. También, en este caso para una inmobiliaria, hemos creado un aparato que avisa si, cuando se sale de casa, se ha olvidado la cartera, el móvil o las llaves". También se utiliza en la agricultura y ganadería.

Es evidente que, para una empresa como Saident, inmersa en el sector tecnológico, resulta de capital importancia su participación en el Centro Tecnológico Leitat de Tarrassa (Barcelona) , una entidad dedicada a transferir conocimiento y fomentar la I+D+i entre empresas. Esto, añadido a su pertenencia a EPCglobal, una asociación internacional para el fomento del uso y el desarrollo de la RFID, más sus acuerdos con diversas universidades españolas, le han permitido a Saident dotarse de una sólida estructura tecnológica, activo muy valorado por el mercado en tiempos de crisis.

"Cuando las cosas van muy bien, las empresas cambian pocas cosas, no miran el gasto", explica Rodríguez; "sin embargo, cuando toca mirar más el dinero, todos quieren optimizar recursos, especialmente en logística y distribución, y ahí entramos nosotros". Con su negocio extendido por toda España, Saident ya piensan en dar el salto a Iberoamérica.