López propone cuatro "grandes pactos de país"

El lehendakari, Patxi López, dejó sentado ayer en el Parlamento vasco que gobernará con su propio programa, pero mostró su voluntad de "negociar y acordar con todos". "Tiendo la mano para buscar grandes pactos de país" en cuatro campos concretos: Sanidad, Educación, políticas sociales y fiscalidad. Son cuestiones de calado, dijo, en las que no cuenta sólo "la gestión del día a día" , sino que la tarea en ellas "va más allá de esta legislatura y de este Gobierno". "Seamos capaces", pidió, "de definir los espacios de consenso que necesita la sociedad vasca y démosles contenido". Ni el PNV, ni Aralar se hicieron eco del emplazamiento, como tampoco lo hizo el único representante del Grupo Mixto, Gorka Maneiro. El portavoz del PP, Antonio Basagoiti, le garantizó que seguirá contando con su grupo para gozar de "mayoría y estabilidad" para gobernar, aunque le planteó algunas dudas sobre el modo de costear sus propuestas.

López: "En la lucha contra ETA no debe haber Gobierno y oposición"

Basagoiti ratifica a López "mayoría y estabilidad" para su programa

PNV, Aralar y UPyD no respondieron a la propuesta de buscar acuerdos

El lehendakari no dejó de mostrar su relativo descontento con el formato de la comparecencia, que habría preferido realizar en un pleno que tenía previsto solicitar. Lamentó que el empeño de PNV y Aralar en forzar la Diputación Permanente impidiera participar a los otros integrantes del Grupo Mixto, EB y EA, que se turnan en ese órgano. Ambas se hicieron oír desde fuera de la Cámara: EB para pedirle que "abandone el marketing" y EA para señalar que ayer López "volvió a demostrar que no tiene capacidad para ser el líder de un Gobierno".

López inició su comparecencia dejando sentada su autoridad y derecho para organizar "reuniones de trabajo" con ellos "sin pedir permiso". "No presenté ningún programa de Gobierno" ni hubo "intento de marginar al Parlamento". Fue "un acto ordinario de Gobierno" de los que ya había habido más, recordó, y de los que habrá otros cuando lo considere oportuno. Que la reunión fuera pública lo calificó de "acto de buena gobernanza y transparencia". El lehendakari salió al paso de la reiteración con que el PNV le acusa de no haber presentado un programa de Gobierno: el suyo se basa en el programa electoral del PSE, en su discurso de investidura, en las comparecencias de los consejeros para exponer sus planes en la Cámara, el calendario legislativo y otro de "planes y acciones significativas" que prometió para este primer trimestre del año.

El lehendakari dijo que hoy "nos encontramos en una situación mejor" que hace ocho meses, después de que su Gobierno haya "sumado fuerzas" con partidos y organizaciones sociales para garantizar la estabilidad y el diálogo social e institucional. Lo que ha llamado "nuevo contrato social" es una propuesta a los ciudadanos, no a los partidos, lo mismo que su llamada a la corresponsabilidad. "El futuro de Euskadi será el resultado de la suma de los esfuerzos individuales", aseveró . Los poderes públicos están para garantizar "derechos y servicios", pero la ciudadanía debe, a su vez, comprometerse a aportar su esfuerzo a la comunidad. De ahí quiere sacar el país de ciudadanos "libre, solidario, sostenible y competitivo" al que volvió a apelar.

López señaló al terrorismo de ETA como el impedimento "para ser todos igualmente libres". "Por eso, en la lucha antiterrorista no debe haber Gobierno y oposición, sino unidad democrática". El lehendakari aprovechó para felicitarse por las últimas detenciones, que consideró una muestra del compromiso que "siempre", recalcó, ha tenido la Ertzaintza. Fue el modo de certificar las aclaraciones que ya habían realizado otros miembros de su Gobierno sobre la polémica suscitada por unas declaraciones del portavoz socialista, José Antonio Pastor.

López desgranó luego sus principales propuestas, aunque los portavoces de la oposición las consideraron insuficientes y se contentaron sólo parcialmente con sus concreciones. La portavoz de Aralar, Aintzane Ezenarro las echó en falta en política económica, en materia fiscal y de empleo y cobertura a quienes carecen de prestaciones y le pidió una ronda de partidos para hablar sobre un nuevo estatus político para Euskadi, así como "una hoja de ruta" para garantizar "la convivencia pacífica entre distintas identidades".

El presidente popular, Antonio Basagoiti, dijo tener algunas dudas sobre el modelo social que propone López, aunque dijo que "apunta teorías sensatas y razonables". Basagoiti sugirió una bajada de impuestos a los autónomos y PYMES y pidió que se elimine "el fraude en las ayudas sociales", que cifró en un 30% . El primer reto es el empleo, recalcó, para pedir "más concreción sobre sus iniciativas económicas".

El portavoz de UPyD, Gorka Maneiro, achacó a López una actuación "dubitativa, acomplejada y falta de decisión", salvo en la política antiterrorista. "Más acción, más convencimiento, más liderazgo y más Gobierno", reclamó.