Una reunión de cinco minutos

La sesión duró cinco minutos. Eran las 10.30 de la mañana cuando empezó el encuentro entre el Departamento de Educación y la Junta Central de Directores de Secundaria, que agrupa a representantes de 30 centros de toda Cataluña.

Estas reuniones, sin ser habituales, se celebran varias veces al año. Pero el último cónclave, el 26 de noviembre pasado, fue un pispás. Empezó y acabó en cinco minutos. El detonante fue la exigencia de los directores de cambiar el orden del día para que se empezaran a debatir algunos temas que les preocupan y sobre los que vienen reclamando: más medios humanos y la mejora del sistema informático de gestión. Fue entonces cuando el secretario de Políticas Educativas, Francesc Colomé, se negó a la exigencia de cambiar el orden del día y dio por concluida la sesión.

Los ánimos ya estaban caldeados desde antes de comenzar la reunión. Para empezar, más de la mitad de los directores ni siquiera entraron en ella y se quedaron fuera. Sólo quedaron en la sala los miembros de la comisión permante de los directores. "Creo que nos equivocamos no entrando todos a la reunión", admite uno de los directores asistentes. "Pero había y hay enfado porque llevamos tiempo pidiendo cosas y no nos hacen caso", remacha.

Ahora las dos partes tratan de recomponer la situación. Colomé pidió hace unos días a la Junta de Directores que se disculpe por su exigencia de última a hora de cambiar el orden del día. Los directores esbozaron anteayer una carta de disculpa al admitir que intentaron forzar el reglamento por exigir cambiar el orden del día. Pero insisten en que mantienen sus peticiones: medios para sustituir a los mayores de 55 años que reducen dos horas su horario y mejora del sistema informático. Y otra reivindicación que quema a los directores: que los alumnos que a mediados de junio ya han aprobado el curso y no tienen que hacer examen final puedan dejar de ir al instituto los últimos días de junio, siempre que los padres lo acepten. "Ya han aprobado y en el centro hay que organizar las pruebas de los otros alumnos", explica otro asistente a la malograda reunión.

Educación dice que ya ha convocado de nuevo a los directores para fumar la pipa de la paz. "Iremos, pero ya veremos. Si no nos hacen caso, lo mejor es no volver", señala un director.