La unión costaría 400 millones en prejubilaciones

En las reuniones celebradas la semana pasada por el presidente de la Xunta con los sindicatos y la patronal se dieron a conocer algunos datos del informe de Facenda que anima a la fusión entre las cajas gallegas. De los 1.100 millones que ambas entidades necesitarían pedir al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), 400 serían necesarios para llevar a cabo prejubilaciones. El resto (700 millones de euros), se emplearían en adelgazar la red de oficinas e integrar los servicios de ambas.

El dato se dio a conocer ayer en la asamblea que celebró en Vigo la sección sindical de UGT para explicar su postura ante el panorama financiero. José Ramón Pliego, delegado en Caixanova, explicó el rechazo frontal de su central de un SIP o fusión virtual como solución para cualquiera de las dos cajas. Equiparó esta fórmula, conocida irónicamente en el sector como RIP, a "un experimento que nadie ha sabido explicar por completo" y sobre el que tienen, afirmó, "serias dudas". Pliego envió un mensaje de "tranquilidad" a la plantilla, y aseguró que en los procesos que se avecinan los sindicatos tienen que estar de acuerdo en una cosa: "La defensa del empleo independientemente de que las soluciones preferidas por unos u otros sean distintas".

Ante un centenar de empleados de las cajas, apostó por la fusión como la mejor opción en el caso de que las entidades no puedan seguir por separado y subrayó que se opondrán a cualquier despido o baja incentivada.