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Industria pagará la restauración de las canteras de Atxarte

El Gobierno lo asume por primera vez tras la desaparición de las empresas

El Gobierno asumirá por vez primera la restauración ambiental de unas canteras ante el abandono de la actividad y la desaparición de las empresas de las explotaban. La actuación se ejecutará en las dos explotaciones de Atxarte, en el municipio de Abadiño y a la entrada del parque natural de Urkiola, donde en los 90 se produjeron las mayores manifestaciones ecologistas en Euskadi contra las canteras: durante cuatro años activistas se colgaron en las paredes para evitar la extracción.

El Departamento de Industria pretende dedicar una partida el próximo año para la regeneración de las canteras de Atxarte y Atxatxiki, cuya actividad está paralizada desde 1995 tras una orden del Ejecutivo. "Las empresas que las explotaron desaparecieron en su día, dejando unas instalaciones abandonadas y peligrosas", afirma el consejero Bernabé Unda en una respuesta parlamentaria a Aralar. La ley sobre las canteras, aprobada en 1984, obliga a disponer de un plan de explotación -regula la actividad extractiva, el plazo concedido o las técnicas empleadas-, que hace 25 años la mayoría no lo tenía, y a otro de restauración, entonces inexistente. Después de que durante 14 años las empresas no hicieron caso a la normativa, en 1998 empezó a ponerse en práctica y se aceleró especialmente 2000. Ese año, el Gobierno aprobó un decreto que obliga a acometer planes de restauración en paralelo a la explotación, con la amenaza de cierre para la explotación que lo incumpla y la obligatoriedad de depositar un aval por las empresas para garantizar la recuperación ambiental.

Están paralizadas desde 1995 y la consejería las tacha de "peligrosas"

Un portavoz de Industria reveló que las canteras de Atxarte no tenían aval cuando se paró su actividad, ya que la obligatoriedad de ese requisito "se normalizó con el procedimiento de regularización iniciado en 1998". Asegura la consejería que asumir la restauración no implica renunciar a que los antiguos propietarios cumplan sus obligaciones. "Las responsabilidades no se extinguen", dice; se trata de no retrasar la recuperación ambiental hasta que culmine la reclamación.

Actualmente existen 53 canteras activas en Euskadi, según los datos de Industria. De ellas, 34 tienen la declaración de impacto ambiental (DIA), un trámite que no existía anteriormente y que ahora se exige a los que carecen de ella cuando modifican su explotación. "Ello explica que existan algunas canteras con DIA y otras que carecen de ella", afirma el consejero Bernabé Unda.

Otro de los planes de Industria es impulsar la explotación subterránea en las canteras con el fin de minimizar el impacto ambiental y paisajístico, además de paliar el agotamiento de las reservas. Ahora, sólo dos explotaciones a cielo abierto tienen a la vez extracciones en túnel y el departamento estudia otros dos proyectos presentados en Vizcaya y Guipúzcoa.

Euskadi es la única comunidad autónoma con ayudas para potenciar la extracción subterránea de la piedra, que rondan los 530.000 euros al año.

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