La mayor reparación a un fumador pone en aprietos a las tabacaleras
Philip Morris debe pagar 201,2 millones de euros a una mujer con enfisema - 8.000 personas esperan la resolución de sus casos en juzgados de Florida
La mayor tabacalera de Estados Unidos ha sido condenada por un jurado de Fort Lauderdale (Florida) a pagar la mayor indemnización concedida en la historia de la batalla legal contra el tabaco. Philip Morris deberá compensar a Cindy Naugle con 300 millones de dólares (201,2 millones de euros) porque los cigarrillos que fumó durante más de 25 años le provocaron un enfisema pulmonar que le ha condenado a vivir conectada a una botella de oxígeno y a desplazarse en una silla de ruedas. Es la primera sentencia después de que el Tribunal Supremo de Florida rechazara en 2006 las demandas colectivas. Hay 8.000 individuales pendientes en los juzgados de este Estado.
Naugle, 61 años, fumó su primer cigarrillo en 1968 cuando tenía 20 años porque pensó que le hacía parecer "mayor" e "interesante". De hecho, esta antigua secretaria relató durante el juicio que eligió la marca Benson & Hedges (Philip Morris) porque se publicitaba como un producto "femenino" y "sofisticado". "Si yo hubiera sabido entonces lo que las compañías de tabaco ya sabían pero escondían, que la nicotina es una droga altamente adictiva, jamás habría dado una sola calada", declaró Naugle durante el proceso que concluyó el jueves. Aun así, el jurado ha querido matizar que encuentra a Naugle responsable en un 10% de su actual situación y en un 90% a Philip Morris. La tabacalera deberá pagar 56,6 millones de dólares (37,2 millones de euros) por los gastos médicos pasados y futuros de Naugle y 244 (163 millones de euros) como castigo por mala conducta.
La justicia culpa en un 90% a la firma de los males de Cindy Naugle
Los abogados de Naugle habían anunciado para ayer una rueda de prensa que no llegó a producirse porque su clienta se encontraba "exhausta" y no se sentía "bien". "Está abrumada pero feliz", declaró Todd McPharlin, en conversación telefónica con este periódico desde Fort Lauderdale. "Está contenta por el hecho de que el jurado haya sido capaz de entender el gran daño que le ha provocado el tabaco y que sea público que las tabacaleras engañaron a millones de norteamericanos, a los que dijeron que fumar no era perjudicial para su salud".
Naugle, hermana del hasta hace poco alcalde de Fort Lauderdale -Jim Naugle, que estuvo junto a ella durante las tres semanas que duró la vista-, consiguió dejar de fumar en 1993 cuando los parches de nicotina llegaron al mercado. Pero ya era muy tarde. El tabaco había destrozado sus pulmones. Durante el juicio, Naugle necesitó cinco minutos para reponerse y recobrar el aliento tras andar unos pocos metros y ascender los siete peldaños que la conducían al estrado de los testigos en la sala del tribunal de Florida. "El jurado ha visto con sus propios ojos lo que los cigarros han hecho con esta mujer", cuenta McPharlin. "Lo han sentido y han fallado a su favor".
Philip Morris recurrirá la sentencia. "Desde el principio, este caso ha estado repleto de irregularidades que permitieron que el jurado tuviese en cuenta las conclusiones adoptadas por un anterior jurado", dijo Murray Garnick, de Altria Group, conglomerado al que pertenece Philip Morris. "Creemos que el total de la compensación por daños es extremadamente excesivo", finalizó.
El caso Naugle pertenece a los casos Engle, una demanda colectiva contra Philip Morris que el Supremo de Florida dictaminó que debía de juzgarse individualmente. La sentencia es la más cuantiosa hasta el momento. La segunda se dictó en California y concedió a la víctima unos 80 millones de dólares (53,8 millones de euros). Una condena anterior de 145.000 millones (97.000 millones de euros) fue recurrida y revertida.
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