La 'mata hari' de manhattan
Ali Wise, empleada de Dolce & Gabbana, acusada de espionaje
Treinta y dos años, un físico de top model, portada en numerosas ocasiones de las revistas de glamour, relaciones públicas de Dolce & Gabbana y habitual de las fiestas de Manhattan. Así es Ali Wise, lo que se conoce como una triunfadora en el mundo de los famosos que se pasean por Nueva York, pero también es una mujer celosa, capaz de hacer cualquier cosa por desamor. Esta semana, vestida con un elegante traje de chaqueta negro, con minifalda y gran escote, y parapetada bajo unas enormes gafas de sol, ha comparecido ante un tribunal de Nueva York acusada de espionaje por cuatro personas: dos ex novios y sus nuevas parejas.
Y es que en el mundo de Ali Wise, ser abandonada por un hombre no es algo que se pueda admitir fácilmente. Wise se ha revelado, según informes policiales, como una mujer furiosa por los celos, pero toda una experta en el espionaje telefónico. Su caso está siendo seguido por todo Nueva York. En muchos blogs se la trata como una heroína que hace lo que muchas mujeres despechadas, pero ayudada por las nuevas tecnologías.
Dos ex novios y sus parejas actuales, víctimas de su acoso telefónico
Wise, escudada en el sistema SpoofCard Wise, ha espiado y acosado a los hombres que la han abandonado y a sus nuevas parejas. La mata hari de Manhattan podía así llamar a una persona y que en la pantalla del teléfono de ésta apareciera el número de una tercera persona en vez del propio; también lograba falsear su voz de modo que nadie la reconociera; y, por supuesto, le permitía grabar todas las conversaciones.
El primero en ser víctima de su acoso telefónico fue Josh Deutsch, fundador de la discográfica Dowtown Records. Rota la relación con Ali Wise, Josh inició otra con Nina Freudenberg, decoradora de interiores con una clientela millonaria. Wise espió 337 conversaciones telefónicas de Nina. Lo mismo le pasó a Briana Rasinki, estilista, que también tuvo una relación con Deutsch. Otro novio de Ali Wise, Jason Pomeranc, magnate de la cadena de hoteles Thompson, también fue víctima de sus ataques de celos, así como sus más íntimas amigas. Tres de ellas recibieron más de un centenar de llamadas de la espía.
El diario New York Post aseguraba esta semana que Wise es para muchos una heroína que hace lo que a muchas mujeres les gustaría hacer: interceptar las llamadas telefónicas de sus ex novios, espiar sus contestadores y, aún mejor, a sus nuevas parejas.
Pero esta venganza de alta tecnología contra las novias de sus ex novios le ha valido una denuncia presentada en su contra en el Tribunal Penal de Manhattan que puede llevarla cuatro años a la cárcel. El fiscal ha asegurado que Wise supuestamente utilizó el SpoofCard en más de 1.000 ocasiones para espiar. Freudenberger, el primer novio espiado, y que ya ha acudido ante el tribunal, se negó a hablar con los periodistas que aguardaban a las puertas de la sala como si de una alfombra roja se tratara. Tampoco quieren salir a la luz otras personas que desde verano han ido a la policía asegurando ser víctimas de esta mata hari. Ella, mientras tanto, ha sido despedida de Dolce & Gabbana; pero se pasea como una modelo por la sala de juicio.
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