La huida por el túnel de 30 pasajeros sin billete bloquea Cercanías en Sants
Renfe reconoce que el 7% del pasaje no paga o paga menos de lo debido
Un grupo de entre 30 y 40 personas subió ayer sin billete al tren en Salou, con origen en Tortosa y destino Barcelona. La llegada estaba prevista a Sants sobre las 8.54 horas y fue bastante puntual. Pero a partir de ahí se desmadejó toda la red de puntualidades. El interventor, que había percibido la presencia del grupo (casi todos subsharianos), avisó a los Mossos d'Esquadra que los esperaba en la estación de Sants. Pero en vez de entregarse, huyeron por el túnel de la estación en ambas direcciones. La policía ordenó paralizar el tráfico por seguridad. El paro se mantuvo desde poco después de las 8.30 hasta más de una hora más tarde y afectó a todas las líneas de Cercanías.
El caos fue notable y la indignación del resto de los pasajeros, informados únicamente de un "problema de orden público", también. Los que acudieron a reclamar la devolución del billete, como consecuencia del retraso, recibieron al principio la negativa por respuesta. "El retraso no es imputable a Renfe". Luego, Renfe dio la orden de aceptar la devolución, pero todos tuvieron que hacer largas colas para llegar a expresar la queja. El número de reclamaciones presentadas fue de más de 2.000.
La intervención de los Mossos d'Esquadra se saldó con 22 detenidos, siete de los cuales fueron puestos a disposición del Cuerpo Nacional de Policía por tratarse de personas sin documentos de identidad, presuntamente en situación irregular.
Que alguien viaje sin billete en el transporte público no es algo inusual. Renfe reconoce que el 7% del pasaje no lleva billete o lleva uno correspondiente a un trayecto más barato que el que en realidad realiza.El fraude de Renfe es el más alto en porcentaje. En Ferrocarrils de la Generalitat, donde el cierre de estaciones está más avanzado, se halla este año en torno al 1,5%. Un caso diferente es el del metro, cuyos responsables sostienen que se cuela menos del 1% porque sólo cuentan como fraude cuando un inspector sorprende a un pasajero sin billete.
Un viaje religioso
La presencia de una cuarentena de subsaharianos en el tren respondía a una cuestión religiosa. Muchos regresaban del encuentro con el marabú (líder espiritual mulsumán) Serigne Mame Mor Mbacke, que visitó Salou el jueves para saludar a los miembros de su comunidad. La presencia del marabú, califa de la cofradía Murid, especie de hermandad con 60 millones de fieles en todo el mundo y muy arraigada en el Senegal, llevó a numerosos subsaharianos del área de Barcelona a Salou. Algunos regresaron el jueves y otros aprovecharon para hacer noche en casa de parientes o conocidos de Salou, donde hay censados unos 1.700 senegaleses censados.
El líder espiritual congregó a unos 500 subsaharianos en una fiesta en la que hubo cánticos y bailes, y que abarrotó una céntrica plaza de Salou.
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