_
_
_
_
Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Benidorm

El espectáculo de la moción de censura refleja el lado más turbio de la política municipal

Las imágenes del pleno en que se consumó la sustitución del alcalde de Benidorm, del PP, por uno del PSOE parecían sacadas de una película de Berlanga. Hasta hubo un minuto de silencio, promovido por el alcalde desalojado y secundado por sus concejales, "por la muerte de la democracia". Y el nuevo regidor declaró que al darse de baja en el PSOE los suyos habían demostrado que "ponen a su ciudad por encima de las siglas". Una interpretación alternativa sería que ponen sus intereses personales por encima de los de su partido.

Los socialistas sin siglas se repartieron ayer los cargos, y al tránsfuga que hizo posible la operación le ascendieron a primer teniente de alcalde. Es una vulneración adicional del acuerdo antitransfuguismo de 2006, cuyo punto tercero establece que los concejales tránsfugas no adscritos "no podrán mejorar su situación anterior al abandono del grupo municipal de origen". Ese acuerdo de 2006 considera tránsfuga no sólo al que se pasa de un partido a otro, sino a quien, apartándose del criterio fijado por su grupo, pacta con otras fuerzas para cambiar la mayoría gobernante.

La experiencia indica que con frecuencia hay intereses urbanísticos detrás de este tipo de mociones de censura. También indica que los tránsfugas y sus beneficiarios tienden a buscar justificaciones morales o funcionales ("evitar la parálisis") a decisiones motivadas por razones particulares. La función del acuerdo es precisamente frenar esa forma de falseamiento del principio representativo, con independencia de los pretextos aducidos.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Los beneficiarios de la operación de Benidorm alegan que la pérdida de mayoría del PP por la fuga del tránsfuga hacía ingobernable el municipio. No es cierto: hay ayuntamientos en España que se han gobernado en minoría. Algunos de ellos socialistas. Quizá sea necesario plantearse reformas legales que permitieran, en casos excepcionales, convocar elecciones anticipadas. Lo que no procede es actuar como si esas elecciones ya se hubieran celebrado y utilizar el voto decisivo del causante del problema para cambiar la mayoría. Hacerlo es estimular el transfuguismo que PSOE y PP se comprometieron a eliminar, y que ambos han incumplido con pretextos similares: en la anterior legislatura hubo 35 alcaldes del PSOE y 20 del PP que perdieron su puesto mediante operaciones posibilitadas por tránsfugas. Para desprestigio del sistema democrático y en particular de la política municipal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_