Algunos transportistas viajan en convoy para evitar asaltos

El robo frustrado de un camión cargado de tabaco junto a la M-40 ocurrido anteayer ha agudizado las alarmas en el sector del transporte por carretera. Las dos grandes organizaciones patronales (Fenadismer y CETM) han pedido que se adopten medidas urgentes, ya que los últimos asaltos que han sufrido han supuesto ataques a sus empleados. Y no están dispuestos a que haya más trabajadores heridos. Por ello, han pedido que se adopten medidas para garantizar la seguridad de las personas y de las mercancías que transportan, en especial, en las grandes distancias.

Ante los últimos robos a camiones, algunas empresas han incrementado las medidas de seguridad.

Obligan a que las furgonetas salgan en convoy, de forma que al ser cuatro o cinco vehículos eviten ataques durante los kilómetros iniciales de la ruta. De hecho, no resulta raro ver a las dos o las tres de la madrugada a estos vehículos de conocidas marcas de transporte circular juntas por la M-40, justo cuando acaban de salir de los almacenes centrales que tienen en lugares como los polígonos de Vallecas y Coslada, entre otros.

Los atracadores rompen los cerrojos blindados con radiales en minutos

Según las patronales del transporte, dos son las áreas que más frecuentan los ladrones. La primera es la autovía de Barcelona (A-2), a la altura del Corredor del Henares. Se trata de un importante eje del transporte de mercancías con Europa. Después, están los polígonos industriales de la zona sur, en especial los de municipios como Fuenlabrada (alberga el mayor de Europa, el Cobo Calleja) y Getafe (donde se asientan grandes empresas de distribución).

¿Cuáles son las mercancías más robadas? "Además del tabaco, que debe de tener muy buena salida para los ladrones, los aparatos electrónicos, informáticos y todo tipo de televisiones. También hemos sufrido ataques a camiones con ropa", explica el secretario general de la Confederación Española de Transportes de Mercancías (CETM), Miguel Valverde, que agrupa a 1.000 empresas de la región.

Una de las últimas modalidades de robo consiste en aprovechar las áreas de servicio en las que paran los camioneros.Los ladrones utilizan los conductos del aire acondicionado o de la calefacción para meter gases que duerman al chófer, cuando éste descansa. Actúan igual si el profesional opta por dejar abierta un poco la ventanilla. Después, abren el remolque y desvalijan el contenido.

"Suelen ser robos que se cometen de noche, porque no hay casi vigilancia. Además, si el conductor se despierta puede ser peor. Las bandas son cada vez más violentas. Antes sólo robaban cuando el camión estaba parado, pero ahora cruzan un coche o dos y les obligan a parar para robarles", destaca el secretario de la Federación Nacional de Asociaciones de Transportes de España (Fenadismer), Juan José Gil. Un total de 3.000 empresas de la región están adscritas a este colectivo.

Otra modalidad de robo consiste en llevarse el camión y venderlo en otros países de Europa del Este o en el norte de África. Esta última opción resulta más difícil para los delincuentes porque tienen que embarcar los vehículos y superar más controles de aduanas y policía, según fuentes del sector de transportistas.

¿Sirven las medidas de seguridad en estos casos? Los vehículos van protegidos con medios modernos. Sin embargo, los ladrones se cargan los cerrojos y cierres blindados con máquinas radiales en escasos minutos. Los vehículos también llevan localizadores GPS conectados con centrales de alarma y con la policía. De esta forma, un camión puede ser localizado en cuestión de minutos. Pero también son minutos los que los delincuentes tardan en descargar un camión y traspasar las cajas a otros vehículos. Eso sí, muchas veces son controlados por las propias empresas. "Si un camión está parado más de 15 minutos en un lugar fuera de la ruta, eso quiere decir que algo va mal, por lo que podemos alertar a la policía", señalan fuentes del sector.

La reivindicación de mayor seguridad de los empresarios del transporte no es nueva. Llevan haciéndola desde hace varios años a la policía y a la Guardia Civil, pero de momento con resultados desiguales. Lo que sí ha notado la patronal es que, con motivo de la crisis, se han incrementado los robos, aunque reconocen que carecen de estadísticas oficiales. "Éstas sólo las tiene la policía, y no nos las facilitan", explican en la patronal. "Lo que está claro es que no hay vigilancia en los polígonos. La seguridad privada resulta insuficiente y nos han llegado a robar camiones de los almacenes y aparcamientos al aire libre"

, añade el secretario general de CETM.

"Lo que sería necesario es que se creara una unidad de la policía o de la Guardia Civil especializada en estos tipos de robos, de forma que hubiera una vigilancia más intensiva en las áreas de descanso y en los polígonos industriales, que son las zonas más sensibles", solicita Juan José Gil, de Fenadismer.

De hecho, son las propias empresas las que se han tenido que poner a trabajar. Y muchas veces facilitan toda la información a la policía para que puedan detener a los delincuentes. Ocurrió a principios de junio cuando la Guardia Civil desarticuló un grupo que robaba camiones en marcha por toda España.