Guerra de cifras en las salas de cine

Lo único que le faltaba al cine: sus cifras oficiales son contradictorias. La discrepancia de datos entre el Ministerio de Cultura y la Federación de Cines de España (FECE), que engloba al 80% de las salas de exhibición españolas, es total. Mientras Cultura asegura que la asistencia a las salas en el primer semestre de 2009 descendió en 800.000 espectadores con respecto al mismo periodo del año pasado, la FECE afirma, por el contrario, que ha habido un incremento de 3,6 millones de entradas.

Los datos "provisionales" a los que se refiere el Ministerio -ofrecidos en su página web- con respecto a 2009 hacen referencia al periodo comprendido entre el 1 de enero y el 14 de junio, sobre un 90% de salas declaradas. Por el contrario, FECE, que ya tiene analizado el semestre completo, utiliza como fuente la empresa Nielsen Edi, que ofrece datos actualizados y con un 95% de las salas escrutadas.

Los filmes españoles pierden 2,3 millones de espectadores, según el ministerio

A los exhibidores les sorprende que el Ministerio de Cultura ofrezca datos tan pesimistas sobre la asistencia a las salas cuando se ha demostrado que, en épocas de crisis, el cine es barato y accesible y una de las alternativas de ocio preferidas por los españoles. Según la FECE, los espectadores totales en lo que va de 2009 suman 48,7 millones frente a los 45,1 de los primeros seis meses de 2008. O sea, que ha habido un incremento de casi un 8%. Para el sector de la exhibición, los buenos datos obtenidos durante el primer semestre del año se deben a varias razones. Según el portavoz de FECE, Borja de Benito, en tiempos de crisis económica el cine aparece como una forma de ocio asequible, y su consumo aumenta.

Según la federación de exhibidores, el sector se enfrenta a un final de año esperanzador gracias al elevado número de grandes estrenos que están por venir, como la última entrega de Harry Potter, Ice Age 3, Enemigos públicos o Up.

En cuanto al cine español, los exhibidores confían en que títulos como Pagafantas, ya en las salas, o el estreno más esperado del año, Ágora, de Alejandro Amenábar, contribuyan a aumentar la cuota.

Paradójicamente, en las cifras del Ministerio de Cultura el que sale peor parado es el cine español. Comparando los dos primeros semestres de 2008 y 2009, las películas españolas han sufrido un descenso en el número de espectadores de casi 2,3 millones de espectadores: de los 7,1 millones que acudieron el año pasado a ver algún título español se ha pasado este año a 4,8 millones. Los beneficiarios de este descenso habrían sido los filmes extranjeros, que han visto cómo sus productos han sido elegidos por 1,6 millones de espectadores más este año que el pasado: de 41 millones se ha pasado a 42,5.

Entre las 10 primeras películas más taquilleras este año solo hay una española, Fuga de cerebros, y está en el puesto noveno. La lista la liderada por la estadounidense Ángeles y demonios, que ha conseguido una recaudación de 13,6 millones de euros, seguida de Gran Torino, de Clint Eastwood (12,3 millones de euros) y El curioso caso de Benjamin Button (12). Fuga de cerebros, dirigida por Fernando González Molina, ha recaudado en lo que va de año 6,4 millones de euros. Otras dos películas españolas aparecen en el ranking de las 25 con más recaudación: Mentiras y gordas, de Alfonso Albacete y David Menkes, en el puesto 21 y 4,2 millones de euros recaudados; y Los abrazos rotos, de Pedro Almodóvar, en el puesto 24 y con una recaudación de casi 4 millones de euros.