"Antivirales bajo siete llaves"
Presume Juan José Güemes, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, de tener "escondidos bajo siete llaves" los antivirales que se han mostrado eficaces para tratar la gripe A (según EL PAÍS, el 26 de julio: Madrid almacena antivirales). Según el periódico, se refiere a dos fármacos: Tamiflu y Relenza; pero cabe inferir que, sobre todo, es Tamiflu lo que se almacena.
El 4 de marzo de este año, este mismo periódico daba cuenta de varios estudios a disposición de la comunidad científica internacional que revelaban que el virus de la gripe H1N1, que entonces, al menos los ciudadanos más legos, no sabíamos lo que era, se había hecho resistente al Tamiflu, lo que, advertía el periódico, podía hacer que "las enormes reservas que han acumulado los países (en España, 10 millones de dosis) no servirían de nada".
Hace escasos días (véase EL PAÍS del 23 de julio), la ministra de Sanidad del Gobierno de España, Trinidad Jiménez, anunciaba "la compra de un nuevo contingente de antivirales, para incrementar la reserva estratégica" (según nota de prensa del ministerio del mismo día), y tras la que contaremos en toda España con 15,4 millones de tratamientos en reserva.
En las páginas oficiales de la Organización Mundial de la Salud puede leerse lo siguiente: "No se dispone de información suficiente para formular recomendación alguna acerca del uso de antivíricos para la prevención y el tratamiento de la infección por el virus de la gripe porcina".
¿Qué es entonces ese "tesoro" que se guarda a buen recaudo de los ciudadanos o esa "reserva estratégica" que se mantiene bajo el más estricto control del Estado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.