El "colapso" de la Administración ambiental

La consejera de Medio Ambiente y Agricultura, Pilar Unzalu, se estrenó ayer en el Parlamento anunciando un plan de choque contra lo que denominó "colapso en la Administración ambiental". Unzalu destacó que la tramitación de las autorizaciones a las empresas más contaminantes (que deberían estar confirmadas o denegadas ya y afectan a más de 250 fábricas), las certificaciones de contaminaciones de suelos o las evaluaciones de impacto de proyectos se hallan paralizadas. "Nos hemos encontrado con un cuello de botella", enfatizó la consejera durante cu comparecencia ante la comisión parlamentaria correspondiente para presentar los planes de legislatura de su departamento.

Como ya anunció el lehendakari, Patxi López, el pasado 5 de junio con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, la consejera resaltó que se revisará el plan ambiental del Gobierno, el ambicioso proyecto aprobado en 2002 y con vigencia hasta 2020. El documento ya fue modificado por la anterior consejera, Esther Larrañaga, al reducir los compromisos para centrarlos en los asuntos más prácticos. Unzalu quiere cambiarlo ahora ante "el desigual balance"de las últimas medidas adoptadas. "Resulta prioritario un nuevo impulso a la gestión medioambiental", apuntó en referencia a un pacto ambiental que "debe estar por encima de los colores políticos".

Unzalu anuncia que intensificará la lucha contra el fraude en el 'txakoli'

La titular del departamento volvió a hablar, como ya se recogía en 2002, de una visión integral y transversal del medio ambiente, lo que no se ha logrado hasta ahora, pues los planes de la consejería han chocado continuamente con el rechazo y el recelo de otros departamentos, como Industria o Transportes.

Tras defender la fusión en una única consejería de Medio Ambiente y Agricultura -"ha supuesto un ahorro de 1,2 millones", precisó-, mostró su intención de elaborar varias leyes durante este cuatrienio, entre las que enunció la de movilidad sostenible o una normativa contra el cambo climático. Expresó su intención de dar un "impulso decidido" a la reserva de la biosfera de Urdaibai, lastrada por los conflictos con la Diputación de Vizcaya, y afirmó que se elaborará un nuevo diagnóstico de su situación actual. A preguntas del PP, manifestó "desconocer, más allá de lo reflejado en la prensa", el proyecto de abrir una sede del Museo Guggenheim en Urdaibai, gestado por la Diputación y que no tuvo el apoyo del anterior Ejecutivo.

Sobre el puerto exterior de Pasaia, Unzalu se mostró cauta frente al rechazo mantenido por Larrañaga por su elevado impacto ambiental. "La sociedad Jaizkibia [formada por las instituciones para impulsarlo] determinará cómo evolucionará la recuperación. No le puedo adelantar más datos", indicó.

La consejera anunció medidas para acabar con el "abandono" del sector primario, como la consolidación de la agricultura ecológica o el impulso de los mercados locales. Pretende intensificar la lucha contra el fraude en el txakoli y propondrá a la Unesco declarar los viñedos vascos como Paisaje de la Humanidad. Citó también el entramado de sociedades públicas dependientes de la consejería, ya censurado en informes oficiales, ante el que pretende realizar un "análisis pormenorizado" de su situación.

En el debate, el PNV mostró su rechazo a la fusión de los departamentos de Agricultura y Medio Ambiente, que aseguró no ha sido bien vista por los baserritarras, pidió un calendario legislativo concreto de las normas anunciadas y medidas para reducir las emisiones contaminantes. El PP preguntó cómo se compensará a los ganaderos asociados a Gurokela, la empresa apadrinada por el anterior Gobierno y cuya participación accionarial venderá el nuevo Ejecutivo.