El reflejo del pasado

La arquitectura de carácter militar se despliega por toda Andalucía. Una gran parte de este patrimonio procede de la Edad Media y se inscribe en las líneas de fortificaciones establecidas a un lado y otro de la frontera nazarí. En concreto, esta marca militar se extiende en diagonal del noreste al suroeste por el centro de la comunidad autónoma.

La arquitectura militar incluye asimismo el reforzamiento de defensas costeras en las bahías de Cádiz y Algeciras entre los siglos XVI y XVIII. Todo este pasado de guerras y conflictos, que dio origen a castillos, alcazabas, alcázares y torres, constituye uno de los apartados del Atlas de la historia del territorio de Andalucía, que ha publicado recientemente el Instituto de Cartografía de Andalucía (ICA), dependiente de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio.

Una veintena de especialistas han participado en la creación de la obra

El volumen repasa las grandes etapas geológicas del sur de la península

Un capítulo analiza la evolución de la población y su distribución

También recorre la evolución del urban desde la época prerromana

La arquitectura defensiva es uno de los numerosos apartados que dan vida a un atlas que trata de vincular la evolución histórica con la situación actual. El Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico ha colaborado en la elaboración de la obra. El atlas, cuya primera edición cuenta con una tirada de 5.200 ejemplares, reúne unos 800 mapas. Varios de ellos han sido confeccionados específicamente para la publicación. El volumen, que ha requerido tres años de preparación, es un complemento del Atlas de Andalucía, editado también por el ICA. Una veintena de especialistas han participado en su elaboración. La obra está prologada por el catedrático de Historia Económica y Premio Nacional de Historia Antonio Miguel Bernal.

Arturo Fernández-Palacios, subdirector del ICA, hace hincapié en que la "orientación del atlas es muy novedosa". "Los atlas históricos han tenido hasta ahora como eje central el ámbito cronológico. En cambio, en el Atlas de la historia del territorio de Andalucía se ve la incidencia de los procesos históricos que han ocurrido en la comunidad, como la evolución demográfica, las distintas culturas, los usos del suelo, las infraestructuras... El atlas muestra cómo los distintos procesos históricos tienen su reflejo hoy en día en el territorio andaluz", explica Fernández-Palacios.

El atlas, que tiene más de 300 páginas, se divide en ocho capítulos. Historia y medio físico repasa las grandes etapas geológicas que ha atravesado el sur de la península Ibérica, los cambios en la vegetación, los pasillos y barreras físicas y la huella dejada por las catástrofes naturales. El segundo capítulo, Demografía histórica, analiza la evolución de la población y su distribución en la región. Organización del territorio se detiene en las formas de orden político y administrativo que han regido la actual Andalucía desde la época romana.

Ciudad y territorio recorre la evolución del urbanismo desde la época prerromana hasta hoy. Economía y territorio estudia los recursos naturales y su influencia en la colonización del territorio, así como las bases de la economía en los diferentes periodos. El capítulo dedicado a las Infraestructuras da cuenta de la historia del viario desde la época romana hasta la actualidad. Este capítulo se ocupa asimismo del ferrocarril, la navegación, el correo, el transporte aéreo y las más recientes telecomunicaciones. El capítulo dedicado al Patrimonio territorial analiza la herencia de las distintas civilizaciones. La síntesis de este trabajo se encuentra, finalmente, en Historias territoriales, un estudio sobre cómo se han concretado todos los factores recogidos en el libro sobre las grandes comarcas.

¿Qué es lo que más le ha sorprendido al subdirector del ICA en este atlas? "Lo más sorprendente es que muchos de los límites de Andalucía están fijados desde muy antiguo. Por ejemplo, los límites de los antiguos reinos tienen mucho peso en los límites provinciales. La distribución medieval tiene, así, mucho peso en las provincias", concluye Fernández-Palacios. Cualquier lector interesado en la historia de Andalucía se sorprenderá con cosas que no conocía o con la comprobación de algunas intuiciones en las páginas de este atlas.