López promete ante los Uria que su mayor objetivo es acabar con ETA
La asamblea de Adegi se convierte en un homenaje al empresario asesinado
Ante dos de los cinco hijos de Inaxio Uria, el empresario asesinado por ETA el pasado diciembre, y cerca de 300 empresarios guipuzcoanos y numerosas autoridades públicas, el lehendakari, Patxi López, se comprometió ayer a utilizar todos los medios a su alcance para acabar lo antes posible con la banda terrorista. Aprovechó el homenaje que la patronal guipuzcoana Adegi tributaba a Uria coincidiendo con su asamblea anual para expresar "el apoyo más decidido" del Gobierno a los empresarios, a quienes recordó que "acabar con ETA, con la extorsión, la amenaza y la violencia son el gran objetivo de país". En ese camino, enfatizó, se requiere "unidad y compromiso político y social".
El lehendakari se mostró convencido de que "el fin de ETA no estará lejos" si se actúa contra la banda "con la fortaleza necesaria y sin fisuras de ningún tipo". En esa estrategia, se comprometió a utilizar "todas las herramientas del Estado de derecho" y ponerse "al servicio de la deslegitimación ética, moral y, sobre todo, social con toda la carne en el asador".
El 'lehendakari' anuncia ayudas para la reforma del interior de los pisos
Ensalzó la figura de Uria, de quien destacó que durante toda su vida hizo lo mismo que los empresarios continúan haciendo a diario: "No renunciar a su responsabilidad, no ceder al chantaje y servir al país creando empleo y bienestar". El lehendakari quiso sumarse con estas palabras al tributo que la patronal le dedicó unos minutos antes al constructor asesinado hace casi seis meses.
El presidente de Adegi, Eduardo Zubiaurre, entregó un ramo de flores y una escultura a María e Igor, hijos del empresario tiroteado, a quienes acompañaba el gerente de la constructor Altuna y Uria, Fernando Lucas. Todo el auditorio de Miramón se puso en pie en una larga ovación. Cuando callaron las palmas, alguien del público gritó: "¡Ánimo! ¡Aurrera!".
Al acto asistieron cargos institucionales como el delegado del Gobierno, Mikel Cabieces; el diputado general de Guipúzcoa, Markel Olano, o los consejeros Carlos Aguirre, Iñaki Arriola y Gemma Zabaleta.
El lehendakari repitió a los empresarios de esta provincia muchas de las medidas que había avanzado un día antes en la asamblea de la patronal vizcaína Cebek. Explicó que su Ejecutivo está "reordenando" los presupuestos para obtener recursos que destinará a aumentar las inversiones en obra pública, mejorar la sanidad y la educación, apoyar la viabilidad de las empresas y aumentar los servicios sociales.
Avanzó que su Gobierno tiene previsto poner en marcha un "ambicioso" plan de ayudas a la rehabilitación interior de las viviendas, aunque no adelantó ningún detalle del mismo. También indicó que se diseñará un mapa sanitario y educativo que determinará la necesidad de construir nuevos ambulatorios, hospitales y centros escolares. En apoyo a las empresas, dio la garantía de que la sociedad avalista Elkargi contará con los recursos necesarios para que todos los proyectos empresariales viables tengan asegurada su financiación.
Un nuevo mandato para Zubiaurre
Eduardo Zubiaurre resultó ayer reelegido como presidente de la patronal guipuzcoana Adegi al ser el único candidato a ocupar el cargo. Al no tener oponente, la asamblea general acordó por unanimidad ratificarle en su puesto sin necesidad de proceder a una votación. Adegi reunió ayer a unos 280 representantes de empresas asociadas, según informó la patronal. Este año se sustituyó la tradicional comida con la presencia del lehendakari por un cóctel, en coherencia con la delicada situación económica.
Zubiaurre, quien se puso al frente de los empresarios guipuzcoanos en junio de 2006 en sustitución de José Martín Echeverría, continuará en la presidencia de esta organización durante los próximos tres años. A comienzos del año pasado tuvo que resolver una crisis interna tras su decisión de renovar la cúpula directiva destituyendo a dos de los pesos pesados de la patronal provincial: su anterior secretario general, José María Ruiz Urchegui, y su adjunto Arturo García. Desde entonces, José Miguel Ayerza es el número dos de Adegi.
Tras agradecer su nombramiento, Zubiaurre abogó en presencia del lehendakari López y la plana mayor del empresariado guipuzcoano por "extender una cultura orientada al diálogo y al acuerdo social", de forma que todos los interlocutores sociales tengan "un papel central" en la aplicación de las políticas de empleo e innovación.
El máximo responsable de Adegi propuso para Euskadi un mercado laboral más flexible y seguro, y criticó el actual porque "tiene efectos negativos en el empleo, merma la productividad, desincentiva la rotación laboral y reduce la inversión de las empresas en formación por la alta tasa de temporalidad".
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