Una pelea entre comuneros pone en peligro una rapa das bestas

La asociación de comuneros de la parroquia de Bretoña, en el municipio de A Pastoriza (Lugo), ha solicitado al Ayuntamiento que impida la celebración de la Rapa das Bestas de Campo de Oso por tratarse de un evento organizado por comuneros de Santa María Mayor, en el vecino Mondoñedo. El presidente de la comunidad de montes de Bretoña, Donnino Carballeira, asegura que no están dispuestos a permitir que este ancestral evento se celebre en un terreno que no pertenece a los organizadores.

Es un episodio más de las desavenencias que enfrentan a comuneros de Mondoñedo y A Pastoriza, que desde hace más de 200 años no han logrado alcanzar un acuerdo para delimitar los espacios de monte de uno y otro lado.De hecho, en las inmediaciones de Bretoña (Xemil), han construido un muro de tierra de dos metros de alto y cuatro kilómetros de largo, para impedir el paso de las reses de sus convecinos mindonienses de Santa María Mayor.

Los comuneros de Bretoña no descartan dar continuidad al muro, aunque antes esperan encontrar una solución "más administrativa" a través del Instituto Geográfico Nacional, el encargado de delimitar la frontera entre ambas comunidades. Mientras tanto, asegura Carballeira, las reses que llegan de Mondoñedo "pastorean" el monte de Bretoña e incluso "fincas particulares". "No hay quien pueda con ellos", enfatiza el representante de los comuneros de A Pastoriza.

En Bretoña exhiben resoluciones de los años 1902, 1930 y 1936 para defender que la zona de Rapa en Campo de Oso está dentro de su territorio. "Hasta la mangada (cierre de madera para los caballos) está en nuestra parte", apunta Carballeira.