ELA y LAB recurren los servicios mínimos de su huelga por "regresivos"

ELA, LAB y los otros cuatro sindicatos nacionalistas convocantes de la huelga general de mañana han recurrido la orden dictada el lunes por el Gobierno que fija los servicios mínimos con el argumento de que es "la más regresiva de cuantas se han dictado hasta ahora". Estos mínimos se elevan al 30% de servicios y frecuencias en el transporte público, el personal de un día festivo en los hospitales, el personal de un sábado en la atención sanitaria primaria, pero con el horario de un jueves y el 100% de los servicios de emergencia. En los colegios se garantizará su apertura y la atención con al menos un docente por cada cuatro alumnos y en las guarderías, con el 25% de la plantilla.

El decreto de servicios mínimos se extiende a otros ámbitos como empresas de gas, electricidad y agua, EITB, escoltas, gasolineras o los registros administrativos.

Representantes de todas las centrales convocantes comparecieron ayer tarde en la sede de ELA en Bilbao y consideraron la orden una vulneración "inaceptable" del derecho a la huelga. Para los sindicatos nacionalistas, el Gobierno ha ido "más allá de lo razonable" y busca boicotear la protesta con unos servicios mínimos "abusivos y regresivos" o reducir su incidencia "con el fin de hacerla menos visible". Estas centrales confían en que el Gobierno, que "con esta orden lo que hace es ir en contra del derecho de huelga", responda a su recurso lo antes posible.

Aumento "innecesario"

La número dos de ELA, Amaia Muñoa, lamentó que el Ejecutivo "acompañe la llamada al diálogo social con esta orden de servicios mínimos". Cuestionó si la resolución es un "resultado" de la reunión mantenida el mismo lunes por el Gabinete con la patronal o "iniciativa propia del Gobierno".

En concreto, los sindicatos nacionalistas critican que Empleo fije los mínimos en el transporte en un 30% "cuando hasta el momento se contemplaba el 20%". A su entender, ese incremento "no responde a las necesidades de la ciudadanía en un día de huelga general, en el que su uso se reduce considerablemente, como ha sido reconocido por la Administración en anteriores decretos".

Respecto al sector educativo, los convocantes de la jornada de hulega general rechazaron que en las escuelas infantiles se garantice la apertura "argumentando la conciliación de la vida laboral y familiar", cuando hay padres que "no pueden acceder a lo largo de todo el año a ese derecho por la falta de plazas existentes" en los centros del Consorcio Haurreskolak (para niños de 0 a 3 años).