Temor en Cataluña a una fuga de ventas de coches

Los vendedores de coches catalanes temen un escape de ventas a otras comunidades autónomas. El anuncio de un plan de ayudas a la compra de automóviles que efectuó de improviso la semana pasada el Gobierno central no será complementado por algunas autonomías, como en el caso de Cataluña, que ha rechazado conceder 500 euros (que se suman a otros 1.500 del Ejecutivo y los fabricantes) hasta que mejore su sistema financiación. Las vecinas Aragón y Valencia sí otorgarán esta subvención.

Esto llevó ayer al presidente del Gremio de Vendedores de Vehículos a Motor, Miquel Donnay, a advertir que la diferencia dejará a Cataluña en una "franca desventaja" y lamentar que los vendedores se vean forzados a una ofensiva de precios que "evite la merma de ventas". Y es que, aunque los gobiernos autónomos puedan pedir el empadronamiento del comprador al que ayuden económicamente, los concesionarios agrupados en Faconauto creen que existen fórmulas para beneficiarse de los subsidios.

El anuncio de este plan se hizo en plena celebración del Salón Internacional del Automóvil de Barcelona, que cerró ayer sus puertas con las marcas celebrando un buen balance de ventas.Como ocurre cuando las autonomías entran a competir en el trato fiscal, renace el debate de la conveniencia o no de unidad de mercado. El presidente de la patronal de concesionarios española, Faconauto, Antonio Romero-Haupold, alerta, en declaraciones a este diario, contra la fragmentación. "Con independencia de que se pida o no el empadronamiento, se irán a comprar los coches donde sean más baratos. Las compras de flotas de empresas, por ejemplo, ya se inscriben donde los impuestos de circulación son baratos, sólo necesitan un domicilio fiscal. Con los particulares tardará más, pero ocurrirá lo mismo", opina. Se puede, por ejemplo, comprar un coche a través de un familiar o amigo. Por ello, la patronal reclama una ayuda única y los concesionarios catalanes piden a la Generalitat "un esfuerzo" para que Cataluña no quede atrás, informa Europa Press.

El plan entra en vigor hoy. Su anuncio en pleno Salón del Automóvil hizo temer que se retarasaran decisiones de compra. Apenas hubo cancelaciones, según explicaban ayer los vendedores en la Fira de Barcelona. Las marcas se mostraron más que satisfechas del balance en un año magro para la economía. Sergio Céspedes, por ejemplo, ha vendido 20 Mercedes en los nueve días de salón y la marca, en general, ha colocado unos 300 coches, frente a los 500 del último salón. Audi asegura que ha vendido el triple que en la anterior edición, 120 vehículos, y ha presentado 180 presupuestos, y Nissan ha alcanzado alrededor de 500 ventas, más de lo esperado. Seat ha vendido 178 coches, según Tomás López, representante de la marca.

El presidente del Salón Internacional del Automóvil, Enrique Lacalle, dijo ayer que más de un millón de visitantes se dejaron caer por la feria y hubo 60.000 solicitudes de presupuestos en esta edición, que, después de quedar amenazada por el rechazo inicial a participar por parte de la patronal Anfac, ha salido airosa con un récord de 55 marcas y el apoyo de patrocinadores.