Leonard Cohen y Miguel Bosé, en Cap Roig
Los festivales de verano se aprietan el cinturón y al de Cap Roig, de Calella de Palafrugell, le ha tocado una rebaja de su presupuesto del 20% con respecto a la edición del año pasado. Crisis económica obliga. Y si el presupuesto baja, lo que sube es la presencia en la programación de los artistas y grupos catalanes o residentes en Cataluña, 10 en total, entre cabezas de cartel y teloneros. Política de subvenciones de la Generalitat manda. El resultado del baja y sube son 22 conciertos de 20 programas -dos artistas, Julio Iglesias y Sara Baras, hacen doble actuación- que se presentarán en el escenario del bello jardín botánico de Cap Roig del 5 de julio al 15 de agosto. Miguel Bosé será el encargado de abrir la programación con su Papitour Gira 2009 y Leonard Cohen lo cerrará.
Entre una y otra fecha un amplísimo abanico de estilos musicales, que van de la música clásica a la música disco pasando por el pop, el jazz fusión, el reggae, el soul, la cançó, la canción de autor, la canción melódica, el flamenco... Todos se darán cita en Cap Roig con nombres como Michael Bolton, Anastacia, Jamie Cullum, Raphael, Marina Rosell, Raimon, José Carreras, James Taylor, Paco Ibáñez, Luz Casal, Carlos Núñez y grupos o conjuntos como UB40, La Locomotara Negra, Chic y Facto Delafé y las Flores Azules, además de una velada de ballet con las estrellas de Ópera de París. Un menú para "sensibilidades diversas", a decir de Arcadi Calzada, presidente de Caixa Girona, entidad promotora del festival.
Calzada explicó que el descenso en un 20% de los recursos de la Obra Social de la entidad de ahorro se ha traslado también al presupuesto del festival, que para este año asciende a 3,3 millones de euros. La edición de 2008 tuvo un coste final de 4,1 millones de euros. El ahorro no comporta, sin embargo, disminución de conciertos. En la edición del festival de 2008 fueron 21, uno menos que este año.
El secreto de más cantidad con menos dinero es fruto, según Martín Pérez, director de la programación, de una racionalización de los costes y un ajuste de los precios de los proveedores, a los que el festival ha garantizado la continuidad en los próximos años a cambio de una rebaja en los precios. Con los artistas se ha fijado un límite de honorarios y se ha optado por aprovechar las giras y desechar las producciones propias.
Impulsor de la programación de verano del jardín botánico de Cap Roig, propiedad de Caixa Girona, Arcadi Calzada abandonará la dirección de la entidad de ahorro en junio, pero antes, explicó, tratará de establecer las bases para que el festival pueda seguir bajo el paraguas de Caixa Girona durante los próximos cinco años.
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