"¿Cuántos huevos hay en dos docenas y media?"

"¡Reponed fuerzas!", aconseja el tutor. Los alumnos salen tranquilos al recreo. Se acabó la prueba de lengua y cultura general. Tienen media hora para descansar antes de ponerse a hacer cuentas. Aunque Adrián ya ha empezado. "Oye, ¿cuántos siglos son 400 años?". "Tío, pues cuatro, si 100 años son un siglo...", le responde Javier. "Pues me he equivocado". Otro chico pregunta para qué sirve un pluviómetro. "Para medir la temperatura", responde Abraham. "Que no, que es para saber cuánta agua cae cuando llueve", replica otro.

Son los chicos del colegio público El Espinillo, en Villaverde. Como 53.000 alumnos madrileños, se enfrentaron ayer a la prueba de Conocimientos y Destrezas Indispensables (CDI) con la que la Comunidad mide el aprendizaje de los alumnos de 6º de Primaria. También ayer 60.000 alumnos de 6º de Cataluña se enfrentaron por primera vez a esa prueba, que Madrid celebra desde hace cinco cursos.

"El examen de matemáticas debería ser a primera hora", dice un docente

En El Espinillo, las preguntas que menos han gustado del primer control son las "de cultura general", explica Jennifer, una chica rubia. Son las que tienen que ver con capitales europeas o los mares y océanos en los que desembocan los ríos. La lectura es sobre Galileo y el telescopio. Buena suerte, porque la semana de la cultura del centro, que empieza el próximo lunes, va de astronomía.

La prueba de matemáticas preguntaba a los escolares cuántos huevos hay en dos docenas y media o por qué número hay que dividir 3.000 para obtener 100, entre otras cuestiones. El colegio de Villaverde, entre los 300 mejores centros de 1.200 examinados el año pasado, obtuvo mejores calificaciones en lengua que en matemáticas. La directora, María Ciprián, se queja de que el orden de la prueba debería ser el contrario. "Las matemáticas requieren más concentración, deberían ser a primera hora", asegura.

La Consejería de Educación cambió el orden para la reciente prueba de 3º de ESO, pero no lo ha hecho en Primaria. A pesar de todo, Ciprián explica que sus chicos han entrado tranquilos porque llevan todo el año haciendo pruebas similares.

El curso pasado los alumnos de la región obtuvieron los peores resultados de la historia de la prueba. Aprobaron el 57% de los centros públicos, frente a casi todos los privados (94%) y cuatro de cada cinco concertados (80%). Fue un año polémico, porque la Comunidad facilitó los datos por centros, municipios y distritos. Oposición y sindicatos le acusaron de favorecer la elaboración de clasificaciones "injustas que no benefician a la comunidad educativa". El defensor del pueblo, Enrique Múgica, acaba de reclamar a Educación que no facilite más esos datos. Pero Educación volverá a ofrecer esa información tanto para la prueba de 6º como para la que realizan desde hace dos años los alumnos de 3º de ESO

"Las familias lo demandan y además es un estímulo para los centros", señaló ayer la consejera de Educación, Lucía Figar, que aún no ha respondido al Defensor. Para evitar la elaboración de rankings, explicó, barajan ofrecer sólo porcentajes de aprobados y suspensos por centros en lugar de notas medias.