La Generalitat activa la desalinizadora de Cunit, que permitirá el trasvase

Medio Ambiente ha redactado ya el proyecto de la planta desalinizadora de Cunit y ha previsto que salga a información pública en mayo, para que se pueda licitar en octubre. Las obras se iniciarían en 2010. Una de las consecuencias de esta instalación es que, de hecho, se habrá producido la interconexión de la cuenca del Ebro con las del Ter y el Llobregat. De la planta saldrán dos tuberías: una hacia Tarragona y otra hacia Barcelona. Ambas reversibles, es decir, el agua podrá circular en las dos direcciones. Esto hará que en caso de necesidad, como durante el último episodio de sequía, se pueda llevar el agua del Ebro hasta el área metropolitana de Barcelona.

Se podrá hacer físicamente, aunque no legalmente. La legislación actual, que sirvió para construir el minitrasvase que abastece Tarragona con agua del Ebro, prohíbe que esta agua llegue a las poblaciones de la provincia de Barcelona. Para que el suministro se produjera habría que modificar la ley. Se podría hacer de dos maneras: a través de la ley de acompañamiento de los Presupuestos Generales o con un decreto ley que fuera convalidado por el Congreso, según explicó el diputado de CiU Ramon Espadaler.

Esta interconexión de cuencas permitirá que, en caso de emergencia, el agua del Ebro abastezca Barcelona y a la inversa, que Tarragona obtenga agua del Ter y el Llobregat en episodios, por ejemplo, de contaminación. Que el agua pueda circular tanto de norte a sur como de sur a norte es una de las condiciones que exige CiU para dar su aprobación a un proyecto que siempre ha defendido. La que se opone a él es ICV, formación a la que pertenece el titular de Medio Ambiente, Francesc Baltasar. "No habrá interconexión", señaló a este diario el portavoz oficial de Baltasar, aceptando que la negativa alcanza al tiempo en que ICV tenga capacidad de veto. Los socialistas, en cambio, no ven con malos ojos la construcción de la tubería, aunque de momento no haga falta utilizarla.

En estos momentos el agua del Ebro llega hasta Cunit, última población de la provincia de Tarragona. Cubelles, su vecina en el norte, se abastece de las cuencas del Ter y el Llobregat. Para impedir la tentación de suministrar agua del minitrasvase a Barcelona, la tubería es telescópica (pierde anchura a medida que se aleja de Tarragona). Las nuevas tuberías no tendrán este problema, reconoció Medio Ambiente.

Baltasar visitó anteayer la desalinizadora del río Tordera, que se está ampliando para aportar 80 hectómetros cúbicos anuales al sistema Ter-Llobregat en 2012. Esto serviría para reducir las captaciones del Ter. Además, esta semana han empezado las pruebas en la toma de agua del mar en la planta del Llobregat, que entrará en funcionamiento en junio y aportará 60 hectómetros cúbicos anuales.