El urbanismo "autónomo" de Chandebrito

No es fácil encontrar en Chandebrito a vecinos que se presten a hablar del clima social y el urbanismo de la parroquia, aunque enseguida asoma su desprecio hacia Josefa Gallego y otro matrimonio que se solidarizó con ella -y que tuvo que abandonar la parroquia durante unos meses por el acoso vecinal- por "picapleitos profesionales". En esta parroquia de 530 habitantes y unas 125 viviendas comenzó la movilización vecinal que acabó, hace tres años, con el asalto al ayuntamiento para abortar el plan general de urbanismo que se iba a aprobar. "No tenía en cuenta las necesidades de edificabilidad de la parroquia", aduce Víctor Manuel Vidal, presidente de la asociación de vecinos, quien observa más consideración en el borrador del avance del nuevo plan.

Vidal explica la virulenta reacción vecinal contra Gallego en la idiosincrasia de Chandebrito, una parroquia tradicionalmente abandonada por el Ayuntamiento. Los vecinos han tenido que construir por su cuenta carreteras y viales, las redes de abastecimiento de agua, las fuentes, los lavaderos... Y también han ido concordando entre ellos las soluciones urbanísticas, frecuentemente pesarosas, para abrir o mantener servidumbres de paso a las viviendas que se han ido haciendo, a veces durante años, "a medida que ahorrabas dinero para seguir construyendo". El resultado es que el 90% de las construcciones vulnera las normas. "El Ayuntamiento no nos daba servicios y, a cambio, hacía la vista gorda con el urbanismo", apostilla Vidal.

Esa disposición fue reventada por el fajo de fotos que presentó Gallego, instando al Ayuntamiento a actuar con el mismo celo que le aplicaba a ella. El vecindario estuvo acosándola durante cinco meses, hasta alcanzar la máxima crispación el 1 de julio de 2001, con decenas de vecinos convertidos en turba descontrolada hasta para la Guardia Civil. Por aquellos hechos hay abierta otra causa penal contra 35 vecinos, para cuatro de los cuales -Carmen Iglesias Rial y parientes- el fiscal pide dos años cárcel; un año para otros, y para todos, sanciones e indemnizaciones diversas.