_
_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Las reglas del juego

Hace muchísimos años, Spiro Agnew, vicepresidente de Estados Unidos hasta que lo empapelaron por sinvergüenza, tuvo un insuperable rasgo de humor por el que se vio obligado a presentar excusas al Vaticano.

A propósito de la negativa del Papa a que se utilizara la píldora (¿dónde habrá quedado esa condena, Dios mío?), dijo con entonación mafiosa "si no juegas el juego, no dictas la regla" (ya dont'a play'a da game, ya dont'a make'a da rule).

Lo dijo en un momento en que muchos sacerdotes en el confesionario hacían la vista gorda a la práctica tan condenada de la anticoncepción.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Lo importante no es que se le afeen al Papa los disparates (el preservativo agrava la crisis del sida en África), sino el poco caso que le hace una gran cantidad de sus fieles sin por ello dejar de serlo.

Son interesantes las batallas que libra la Iglesia contra todo lo que se mueve menos los obispos lefebvristas: la contracepción, el divorcio, el preservativo, el aborto, las células-madre, la redondez de la tierra y la teoría de la evolución.

En los estudios del seminario debería incluirse una asignatura llamada Hechos científicos comprobados.

Tampoco estaría de más recordar a los católicos que hay muchos seres humanos que no son católicos y que no tienen por qué seguir su código de conducta. Y viceversa.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_