Las obras de la estación de la Sagrera comenzarán antes de acabar el año

Un respiro para la Sagrera: las obras de la estación empezarán a final de año. Eso dijo ayer el número dos del Ministerio de Fomento, Víctor Morlán. La financiación de la futura estación del AVE se resolverá a través de la disposición adicional tercera del Estatuto, la que prevé la asignación a la Generalitat por parte del Estado central del equivalente al 18% del PIB catalán para infraestructuras.

En 2002, se fijó que los 360 millones de euros para construir la que será la estación central del AVE en Barcelona saldrían de las plusvalías obtenidas con la venta de pisos y oficinas que se iban a construir en los terrenos de Renfe de la Sagrera. La crisis ha echado al traste estas previsiones.

La posibilidad de que la financiación de la obra se hiciese con cargo a los fondos estatales para infraestructuras que prevé el Estatuto fue apuntada por el Gobierno catalán y tomada al vuelo por el Consistorio barcelonés, angustiado por el peligro que acechaba a la Sagrera.

El Gobierno central se pronunció ayer a favor de recurrir al Estatuto para desencallar el problema. Pero lo hizo con no pocas cautelas. Tantas, que el alcalde evitó mostrarse en exceso optimista a la salida de la reunión. "Quedan meses de mucho trabajo y de concretar cuestiones. Lo importante es que se genera un buen marco para buscar la mejor fórmula", subrayó Hereu. Al encuentro también asistieron el secretario de Estado de Planificación, Víctor Morlán, el edil de Urbanismo del Consistorio, Ramón García Bragado, y el presidente del Adif, Antonio González.

La primera cuestión por concretar en el futuro inmediato es de qué inversión exacta se está hablando. Eso lo dijo con claridad Morlán, quien, sin embargo, declinó pronunciarse sobre si eso quiere decir que el coste final superará los 360 millones.

Después, el Ministerio de Economía y el Departamento de Economía tendrán que elaborar la estructura financiera de la operación. Las obras de la estación se tienen que licitar en un solo acto. Otra cosa es programar su financiación a lo largo de varios años. Fuentes municipales apuntaron que para 2009 podría disponerse de la bolsa de unos 150 millones de euros de los fondos estatales de infraestructuras todavía por asignar.

Con independencia de la fórmula, Morlán dejó claro que los trabajos podrán empezar a final de año. El calendario con el que se trabajaba es el siguiente: en abril o mayo, proyecto ejecutivo; licitación de las obras antes del verano; adjudicación al inicio del otoño, e inicio de las obras antes de que acabe 2009. La duración prevista inicialmente era de tres años, es decir, tenerlas acabadas en 2012, el mismo año del final de las obras del túnel que atraviesa Barcelona.

La cuestión de qué Administración se llevará en el futuro el aprovechamiento de la edificabilidad de la Sagrera no fue abordada ayer. Cuando la Generalitat planteó la financiación de la estación con los fondos estatales de infraestructuras dejó claro que la plusvalía que se saque a los terrenos debería destinarse a nuevos proyectos en Cataluña.

Antes de la reunión, Hereu participó en el Fórum Europa, donde desgranó las ambiciones de Barcelona y criticó la pérdida de tiempo y los "errores" de la Administración central y de la Generalitat en la década de 1990. En el turno de palabras, al ser preguntado sobre el proyecto del Miniestadi del Barça, Hereu insistió en que lo primero es llegar a un acuerdo sobre las contrapartidas que ofrece el club al barrio y al área metropolitana.