Estados Unidos desplegará 17.000 soldados más para reforzar el frente de Afganistán
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, actuando por primera vez en su condición de comandante en jefe, ordenó ayer el envío de nuevas tropas a Afganistán para reforzar al Ejército norteamericano en su lucha contra los insurgentes talibanes y las células terroristas de Al Qaeda que se refugian en la frontera de ese país con Pakistán.
Cumpliendo con su promesa electoral de aumentar progresivamente el número de soldados en el frente afgano mientras reduce la presencia en Irak, Obama anunció a través de un comunicado el despliegue inicial de unos 12.000 militares, que llegarán a 17.000 a finales del verano, un incremento de casi el 50% sobre las tropas actuales. El primer contingente, según detallaron fuentes del Pentágono, estará integrado por una unidad de marines de unos 8.000 hombres y mujeres, más unos 4.000 miembros del Ejército.
Horas después de firmar la ley que aprueba el paquete de estímulo económico, el presidente ordenó el despliegue de estas tropas, según su declaración, "consciente de que la situación en Afganistán y Pakistán requiere una intervención rápida y urgente. Los talibanes se están reforzando en Afganistán, mientras Al Qaeda apoya su insurgencia y amenaza a Estados Unidos desde su refugio en la frontera con Pakistán".
En este momento hay unos 36.000 soldados estadounidenses de servicio en Afganistán. De ellos, 17.500 prestan servicio bajo el mando de la OTAN. El resto se dedica a tareas de contrainsurgencia, en colaboración con las agencias de inteligencia del Gobierno de EE UU, o está, simplemente, de servicio en misiones de entrenamiento.
En un artículo de opinión publicado en julio en el diario The New York Times, en plena campaña electoral, Obama dijo que, como presidente, ordenaría el refuerzo de la misión en Afganistán en, al menos, dos nuevas brigadas. "Necesitamos más soldados, más helicópteros, una mejor recolección de información y una mejor asistencia civil para cumplir nuestra misión allí", escribió.
A dos días de su primer viaje oficial a Canadá, el primero que realiza al extranjero, Obama aclaró que no tiene intención de presionar directamente al primer ministro de ese país, Stephen Harper, para que mantenga a sus 2.800 soldados más allá de 2011, el límite que ha impuesto el Parlamento canadiense para que sus tropas regresen a casa.
"Obviamente voy a seguir pidiendo a otros países que nos ayuden a decidir cómo enfocamos este dificultoso problema. Pero no voy con ninguna petición específica que quiera llevar a nuestras reuniones", afirmó el presidente en una entrevista concedida al canal de televisión CBC.
En el comunicado difundido ayer, Obama no precisó el grado de compromiso militar que va a pedir a los aliados que han apoyado a EE UU desde la invasión del país en 2001, entre ellos España. Se limitó a decir que "a medida que diseñamos los objetivos estratégicos, lo haremos en coordinación con nuestros amigos y aliados". Pero recordó la necesidad de buscar "conjuntamente los recursos necesarios para vencer".
Víctimas civiles
- El recrudecimiento del conflicto afgano se ceba en los civiles, con 2.118 muertos en 2008, casi un 40% más que el año anterior, según la misión de la ONU en el país (UNAMA).
- Es la cifra más alta de víctimas desde que los talibanes fueron expulsados del poder en 2001.
- 1.160 fallecidos (el 55%) cayeron en acciones atribuidas a los talibanes.
- 828 personas (el 39%) perecieron a causa de operaciones de los militares afganos o de las tropas internacionales.
- Los ataques aéreos son responsables del 64% de las muertes atribuidas a las fuerzas progubernamentales, según la misión de la ONU.
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