La Diagonal compartida

Este 2009 el Plan Cerdà cumple 150 años. Durante siglo y medio, éste ha guiado la transformación de la ciudad con los objetivos de mejorar las condiciones de vida de la población y racionalizar el urbanismo, el espacio público y los desplazamientos. La Diagonal, precisamente, estaba en el corazón, en el centro del proyecto, pensada como una de las avenidas principales para ejercer de nexo entre sus extremos (casi ya con visión metropolitana). En el Ayuntamiento, desde el gobierno liderado por Jordi Hereu queremos profundizar en el sueño de Cerdà, queremos hacer de la Diagonal un gran paseo, que mejore la conectividad de la ciudad, pero, a la vez, que adapte sus espacios a las necesidades del nuevo siglo, enlazando Trambaix con Trambesòs y pacificando la circulación. Estamos frente a un proyecto complejo, difícil, que marcará, por su importancia y magnitud, el presente y el futuro de Barcelona. Por ello, es una magnífica oportunidad para demostrar que queremos avanzar con la suma de todos, que queremos llegar a la transformación de una de nuestras vías más importantes, a través del proceso participativo como nunca se ha vivido en Barcelona. Por primera vez, haremos uso del mecanismo de consulta ciudadana previsto en la Carta Municipal, que, a diferencia de un referéndum, permitirá a la ciudadanía, no sólo contestar afirmativa o negativamente, sino decidir entre dos propuestas.

Será un proceso intenso. Habrá que poner el acento en explicar y formar a todos los interesados en participar los parámetros que pueden entrar en la reforma y facilitaremos el proceso de aportaciones. En el reciente Programa de Actuación Municipal se recogieron 80.000 opiniones. Esta vez, las sugerencias serán recogidas y analizadas hasta resumirlas en dos propuestas técnicamente viables que serán sometidas al proceso final de consulta. Durante una semana, todos los empadronados mayores de 16 años podrán optar en favor de una de las dos opciones. La idea no tiene precedentes y es lógico que cree cierta polémica o incredulidades. Pero no será una pantomima. Que llamemos a votar a todos los empadronados mayores de 16 años es, en sí, algo único. Querer oír la voz de los más jóvenes, oír su voz con la misma consideración que la de cualquier otro ciudadano, huyendo de paternalismos, es nuevo. Muchas veces elucubramos sobre lo que quieren nuestros jóvenes, pocas veces les preguntamos. El gobierno de Hereu sí lo hará.

Y votarán todos los ciudadanos y ciudadanas empadronados. Recién llegados o no, todos somos ciudadanos, en igualdad de derechos y deberes, y parece increíble que la derecha de esta ciudad pretenda prohibir que se pronuncien los que no hayan obtenido la ciudadanía. Los extranjeros (inmigrantes o no) que viven con nosotros son barceloneses que construyen la ciudad día a día y tienen derecho a construir el futuro que habremos de compartir. Qué buena oportunidad, el diseñar una vía tan importante, para participar, para implicarse. Estamos ante un proyecto nuevo, distinto. La nueva Diagonal como oportunidad para imaginar ciudad. Enfrente, un gran reto político y técnico. En el horizonte, un gran eje para disfrute de los ciudadanos, con más espacio para el peatón, con prioridad para el transporte público... Un reto que podremos superar, sumando, para que entre todos los barceloneses, hasta los escépticos, podamos construir una nueva Diagonal.

Carles Martí es primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona.