El PP pregunta al PSPV si De la Vega votará por la caducidad del trasvase

El PP valenciano aprovechó ayer la polémica sobre el futuro del trasvase Tajo-Segura para seguir golpeando en el mismo objetivo, es decir, la figura política de la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. "Que diga [Jorge Alarte] si puede garantizar que la vicepresidenta del Gobierno va a votar en contra de la caducidad del Tajo-Segura", remarcó Ricardo Costa, secretario general del PP de la Comunidad Valenciana, en un acto celebrado en Almoradí, al que también se sumó el consejero de Medio Ambiente y Agua, José Ramón García Antón. El encuentro contó con la asistencia de unas mil personas, informa Efe.

El dirigente popular prosiguió su ataque a la vicepresidenta y el líder de los socialistas valencianos en estos términos: "Si la vicepresidenta no vota contra la caducidad del trasvase, Alarte será cómplice de que el sur de Alicante y Murcia se queden sin agua". "Pasamos sed porque en esta tierra falta agua y en La Moncloa no hay sensibilidad con el sur de Alicante y de España", añadió.

"Si la vicepresidenta no vota la caducidad, Alarte será cómplice", acusa Costa

Costa anunció que el PP sí redactará una propuesta alternativa para derogar la disposición adicional del nuevo Estatuto de Castilla-La Mancha, que recoge el fin del trasvase Tajo-Segura. "Por contra, si dejamos en manos de Alarte la defensa del Tajo-Segura estamos poniendo en su mano la garantía de la caducidad del trasvase", reiteró.

Mientras, el consejero García Antón señaló que los socialistas valencianos "votaron en 2005 a favor de suprimir el Tajo-Segura y durante más de cuatro años han apoyado si rechistar la destrucción sistemática de toda la política del agua que ha llevado a cabo el Gobierno popular". Según Antón, derogar el Tajo-Segura supondría dejar a más de un millón de alicantinos con menos de la mitad los caudales con los que ahora cuentan.

En la sede de los socialistas valencianos, el secretario general, Jorge Alarte, reunió por la mañana a diputados y senadores valencianos en las Cortes Generales para trasladarles su rechazo a las enmiendas presentadas por los grupos del PP y PSOE al Estatuto de Castilla-La Mancha. Faltaron los tres cabezas de lista del PSOE Jordi Sevilla, por Castellón, María Teresa Fernández de la Vega por Valencia y Bernat Soria por Alicante y otros dos miembros de la Permanente, que disculparon su presencia.

Alarte reivindicó una vez más sus tres condiciones: que no se date la la caducidad del trasvase y que desaparezcan la referencia a una reducción gradual del uso del caudal o el aumento de reservas para Castilla-La Mancha a 600 hectómetros cúbicos.

La mayoría de los presentes apoyaron el objetivo planteado por el secretario general, pero hubieron divergencias en torno a la estrategia. "El PSPV se debe a aquí", defendió Alarte. Un amplio número de parlamentarios apostaron por que los socialistas valencianos hagan valer su posición como hasta ahora, pero mantengan el diálogo con el PSOE y la dirección del grupo en el Congreso de los Diputados. "Son inaceptables en su contenido, en sus objetivos y en su planteamiento", reiteró Alarte ante los parlamentarios.