Una ambulancia tarda 30 minutos en atender un infarto

Sanidad abrió ayer un expediente informativo para averiguar qué provocó que la llamada por una urgencia médica en La Canyada, Paterna, a las 11.30 no recibiera la atención necesaria de una ambulancia hasta las 12.06. El paciente murió de un infarto en el Hospital General.

A las 11.30, el Centro de Información y Coordinación de Emergencias (Cicu) recibe una llamada en la que detalla, según Sanidad, dolor de pierna e imposibilidad para caminar. El Cicu moviliza una unidad de Transporte No Asistido, que no es para urgencias.

A las 12.03, como no había llegado, hubo una segunda llamada en la que, según Sanidad, se dan detalles compatibles con el cuadro de un infarto y se moviliza un Soporte Vital Básico, una ambulancia para atenciones de emergencia. El hombre, de 51 años, fue trasladado al hospital General de Valencia, donde falleció. El alcalde de Paterna, Lorenzo Agustí, del Partido Popular, lamentó ayer lo ocurrido, agradeció la atención prestada al enfermo por la Policía Local, pidió disculpas por la demora del servicio sanitario y exigió a la Generalitat una base para Samu (Servicio de Atención Médica Urgente) en la localidad para que deje de depender de la base de Manises.

Agustí manifestó que, por su parte, asumía la responsabilidad por no haber puesto en marcha el servicio de ambulancia municipal por cuestiones administrativas. Y exigió "la puesta en marcha de una base permanente del SAMU en la ciudad, en un plazo de tiempo no superior a 10 días".

La junta de barrio de La Canyada solicitó el pasado 19 de agosto una reunión con el consejero de Sanidad, Manuel Cervera, para exigirle ambulancias, sin que, aseguró ayer su presidente, José Carot, haya habido respuesta.