_
_
_
_
_

Imputadas 168 personas por la estafa del 'caso Nilo'

La Fiscalía Anticorrupción de Málaga ha cerrado el caso Nilo sobre la estafa de la lotería nigeriana, una de las investigaciones más complejas, tanto por el número de imputados como de víctimas, a las que se ha enfrentado desde su creación en 2005. El ministerio público pide nueve años y medio de prisión para cada uno de los 168 acusados por el envío masivo de cartas en las que se anunciaba al destinatario que había ganado un premio de la lotería española -a la que ni siquiera había jugado- y se le reclamaba a cambio una cantidad económica para tramitar el pago del premio, según el escrito de acusación, al que tuvo acceso Europa Press.

Los 168 imputados, la mayoría de nacionalidad nigeriana, están acusados de un delito continuado de estafa, en concurso ideal (unidad de acción) con otro de falsedad en documento público; y de asociación ilícita. Según la Fiscalía, la red consiguió estafar a 247 personas de una treintena de países de todo el mundo. Las cantidades defraudadas más habituales oscilaban entre los 525 y los 96.000 euros, aunque uno de los estafados llegó a pagar 221.000 dólares (169.300 euros).

310 detenidos

Las investigaciones de la Brigada de Delincuencia Económica y Financiera del Cuerpo Nacional de Policía arrancaron en abril de 2005. En junio de ese año, en la denominada operación Nilo fueron detenidas 310 personas, de las cuales más de 250 ingresaron en prisión provisional, creando un serio problema logístico en la cárcel de Alhaurín de la Torre. La Fiscalía insta al juzgado de Instrucción número 6 de Málaga a que archive la acusación de 65 imputados.

El escrito del ministerio público ocupa 360 páginas. Las cartas se enviaban de forma "aleatoria" e "indiscriminada" a países de todo el mundo con premios de lotería inexistentes. Durante la operación policial se registraron 159 domicilios particulares y 17 locutorios telefónicos, la mayoría en Málaga capital, aunque también en otros municipios de la Costa del Sol, como Torremolinos, Mijas o Marbella. Los supuestos cabecillas de la organización facilitaban listados de direcciones a los del escalón inferior. Estos compraban cantidades ingentes de sellos y sobres para enviar las misivas fraudulentas. Este timo, según la Fiscalía, "es un auténtico fenómeno delictivo de trascendencia internacional".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_